Tener sexo con tu pareja en verano, cuando las temperaturas superan los 30 grados o incluso los 40 grados, puede ser todo un reto. Lo que normalmente sería un momento muy agradable puede llegar a convertirse en una molestia debido a las altas temperaturas.
En estas condiciones, las posturas tradicionales como el misionero o el perrito no son igual de placenteras. Con el calor, el esfuerzo necesario para tener sexo es mucho mayor, y lo normal es que los dos acabéis sudando de forma muy fuerte. Esto hace que muchas parejas reduzcan la cantidad de sexo que tienen cuando llega el calor del verano.
Sin embargo, hay una solución a este problema: existen algunas posiciones sexuales para cuando hace calor, diseñadas precisamente para evitar los inconvenientes que provoca el encuentro sexual en un entorno con altas temperaturas. Sin tener que tener sexo en el agua o debajo de un ventilador, tú y tu pareja podréis disfrutar de vuestras relaciones con estas posiciones para verano. En este artículo te hablamos de las mejores de todas.
Posiciones sexuales para cuando hace calor: ¿cuáles son las mejores?
El sexo no tiene por qué estar reñido con las altas temperaturas. La siguiente lista de posiciones sexuales para cuando hace calor te ayudará a disfrutar de tus relaciones, incluso, en las condiciones más extremas:
- Técnica de alineación coital
- Posición de la cuchara
- Posición del perrito.
La técnica de alineación coital no se trata solo de una de las mejores posiciones para llevar a la mujer al orgasmo durante el sexo, sino que también es perfecta para practicarla cuando las temperaturas son muy altas. Debido a la mezcla de estas dos características, se ha ganado el primer puesto en nuestra lista.
Practicar la técnica de alineación coital puede parecer un poco complicado al principio, pero una vez que hayas entendido cómo funciona verás que es muy sencilla de realizar. Consiste en lo siguiente: comenzando en la posición del misionero , la mujer debe cerrar ligeramente sus piernas y elevar su cadera mediante el uso de una almohada o algo similar.
En ese momento, el hombre tiene que desplazarse ligeramente hacia delante, de tal manera que las pelvis de ambos queden perfectamente alineadas (de ahí el nombre de la postura). En esta posición, el movimiento a realizar es de arriba hacia abajo, por lo que el contacto se minimiza entre ambos, pero hay una mayor estimulación del clítoris.
Debido a que hay menos contacto entre los dos que en el misionero tradicional, esta postura es perfecta para evitar pasar mucho calor cuando las temperaturas son muy altas.
2- Posición de la cuchara
Continuamos nuestra lista de mejores posiciones sexuales para cuando hace calor con una de las más sencillas de realizar. Además de ser muy romántica, la posición de la cuchara requiere poca energía y es por tanto perfecta para los días de más calor. Consiste en lo siguiente: la mujer se tumba de lado, dándole la espalda al hombre, y abriendo ligeramente sus piernas. Para conseguirlo, debe levantar una de ellas, que puede mantener en esa posición con la ayuda de sus manos.
El hombre se tumba detrás de ella y la penetra por la espalda; de esta manera, tan solo tendrá que mover ligeramente su cadera para generar placer para ambos. Por otra parte, esta postura da mucha libertad en el sentido de que las manos del hombre quedan totalmente libres; por lo tanto, podrá utilizarlas para explorar el cuerpo de su pareja y estimular sus zonas erogenas.
3- Posición del perrito
La posición del perrito es una de las favoritas de las mujeres para conseguir un orgasmo; pero también se trata de una de las mejores posiciones sexuales para cuando hace calor. Esto se debe a que apenas existe contacto entre ambos miembros de la pareja durante el encuentro sexual en el que se utilice esta posición.
La postura básica es muy sencilla: la mujer debe ponerse de rodillas en la superficie donde se vaya a practicar sexo, con las manos también apoyadas. De esta forma, debe quedar a cuatro patas, con las caderas ligeramente arqueadas para facilitar la penetración.
El hombre introduce su pene por detrás, ajustando para ello la altura de la pelvis de la mujer con sus manos para facilitar el proceso. En esta posición, el único contacto necesario entre los dos es el de los genitales; aunque el hombre puede apoyar sus manos en las caderas de su pareja para conseguir mayor estabilidad.