El Salvador, actualmente en guerra contra las pandillas, y el crimen en general, el Gobierno Central pidió por medio del Ministro de Seguridad, Gustavo Villatoro, la ampliación del Regimén de Excepción vigente desde marzo de 2022.
La Guerra Contra Pandillas por parte del gobierno de Nayib Bukele, se puede decir una cosa, es implacable.
En la Asamblea Legislativa una vez más se hizo presente junto al titular de seguridad, el Director de la Policía Nacional Civil (PNC) Mauricio Arriaza Chicas y el Ministro de la Defensa Nacional, René Francis Merino Monroy. Solicitando la renovación del Régimen de Excepción.
Villatoro por su parte mencionó que esta herramienta otorgó en todo este tiempo con números que la población siente más confianza para desplazarse de un lugar a otro, de lugar a lugar a lo largo y ancho del país, con mucha paz y tranquilidad.
“El Régimen de Excepción ha demostrado con números, la libertad que siente nuestra población de poder moverse de un lado a otro, incluso las métricas de las aplicaciones sobre la movilidad de El Salvador, todas han tenido un gran incremento” indicó el Ministro de Seguridad, Gustavo Villatoro
Villatoro también destacó que la medida es histórica.
“Adicionalmente el Régimen de Excepción nos dejó un registro histórico desde los 201 años, de ser República independiente, el año menos violento de la historia de este país” añadió el titular Villatoro
Entre otras cosas que se mencionaron vía conferencia de prensa, es que salimos de la lista negra
de países más violentos, y que actualmente se están protegiendo los derechos humanos de 6 millones de personas honradaz dentro del país
Lo cierto es que con estas herramienta por el momento sí ha logrado cifras records y que, con ella El Salvador respira de momento un ambiente de confianza y seguridad como nunca antes.
Pero solo el futuro indicará si todo lo obrado en criterio de seguridad ciudadana es bueno para nuestra nación a largo plazo, o no. Todo depende en buena medida de los funcionarios públicos de turno, en cierta medida también la población con el derecho de denunciar lo malo, señalar lo bueno, y dejar ambos un legado positivo a muy largo plazo.