Estados Unidos confirmó este lunes que incluyó al expresidente hondureño Juan Orlando Hernández en el listado de “actores corruptos y antidemocráticos”, lo cual lo vuelve no elegible para visas y admisión en territorio estadounidense. La medida fue anunciada por el secretario de Estado, Antony Blinken en su cuenta de Twitter.
“Estados Unidos está promoviendo la transparencia y la rendición de cuentas en Centroamérica al hacer públicas las restricciones de visa contra el expresidente de Honduras, Juan Orlando Hernández, debido a actos corruptos. Nadie está por encima de la ley” Antony Blinken, secretario de Estado de EEUU.
Poco después, el Departamento de Estado confirmó la inclusión de Hernández en la lista de Actores Corruptos y Antidemocráticos de el 1 de julio de 2021.
“Creemos que estos temas son clave para un futuro mejor para Centroamérica. Para avanzar en esta prioridad, estamos desclasificando y publicitando la inclusión del expresidente hondureño Juan Orlando Hernández en la lista de actores corruptos y antidemocráticos de los Estados Unidos, bajo la Sección 353 de la Ley de Compromiso Mejorado del Triángulo Norte-Estados Unidos, según enmendada, que generalmente las personas enumeradas no son elegibles para visas y admisión a los Estados Unidos”, dice el Departamento de Estado.
Juan Orlando Hernández se ha involucrado en una corrupción significativa al cometer o facilitar actos de corrupción y narcotráfico, y al utilizar las ganancias de actividades ilícitas para facilitar campañas políticas”. Departamento de Estado de EE.UU.
Según el Departamento de Estado, Hernández fue identificado por su nombre en el testimonio de un testigo bajo juramento en un proceso penal federal de los Estados Unidos “por haber recibido ganancias del narcotráfico como parte de la financiación de su campaña”.
“El Departamento incluyó a Hernández en la lista de Actores Corruptos y Antidemocráticos el 1 de julio de 2021 y ahora está publicitando este estado”, agrega el comunicado estadounidense.
“Estados Unidos continúa utilizando las herramientas a su disposición para promover la rendición de cuentas por corrupción y otros ataques a la seguridad, la estabilidad y las aspiraciones democráticas del pueblo de Honduras, Centroamérica y el mundo. Continuaremos asociándonos con funcionarios del gobierno hondureño y miembros de la sociedad civil y del sector privado que muestren dedicación para combatir la corrupción y fortalecer la gobernabilidad democrática, incluso como parte de una política general para abordar las causas profundas de la migración irregular de la región. Continuaremos apoyando al pueblo de Honduras en su esfuerzo por contribuir y beneficiarse de las instituciones democráticas, generar oportunidades económicas equitativas y crear el futuro que desean para ellos y sus familias”, agrega el comunicado estadounidense.