La caída de los precios internacionales del café, una baja producción por los efectos del hongo de la roya que aún persisten en el parque cafetalero y la falta de crédito harán que 2018 sea un año crítico para el sector caficultor, previó ayer la Asociación Cafetalera de El Salvador (Acafesal).
José Omar Flores, presidente de la Acafesal, aseguró que “se avecina un año bastante crítico” debido en particular por la perspectiva hacia la baja de los precios del café que se cotiza a través de la bolsa de valores de Nueva York.El promedio mensual del precio indicativo que calcula la Organización Internacional del Café (OIC) llegó en diciembre de 2017 a su nivel más bajo en los últimos 22 meses y experimentó una ligera recuperación en enero pasado. Sin embargo, el mercado externo está a la expectativa de la producción récord de Brasil para el ejercicio de 2018/2019.
Sigfredo Benítez, presidente del Foro del Café, advirtió que Brasil es uno de los principales productores y exportadores de café de América Latina y si aumenta su comercio es posible que el precio internacional se mantenga en niveles bajos en la bolsa de Nueva York, por donde circula la mayor parte de la producción mundial.
Benítez explicó que en la bolsa, el precio promedio ha llegado a $120 por quintal de café oro exportable, pero el productor lo entrega en oro uva. Es decir, que se debe descontar el costo de procesamiento, la merma y deterioro de calidad.
Sin embargo, agregó, el costo general de un quintal de café ronda los $70 y $90, lo que solo cubre las actividades básicas, como el control de maleza, plagas o enfermedades. Además incluye la fertilización, la cual se ha incrementado en los últimos años y representa el 50 % del costo de producción.
“El mercado en este momento está golpeando, en adición a los problemas de baja de productividad que hemos tenido por la consecuencia de la roya y el cambio climático”, agregó Benítez.