El arte es muy importante para cualquier sociedad, sin embargo, en El Salvador la labor de los artistas no siempre es reconocida como empleo. Marvin Pleitez es un artista, actor de teatro y maestro de expresión corporal, tiene más de 15 años de ejercer como artista y asegura que las oportunidades laborales para la población de artistas en general son muy pocas.
“Son mínimos los espacios para poder desarrollarnos como artistas, son muy escasos los espacios que tenemos y esos pocos espacios muchas veces no nos dan la dignificación que merecemos, ya que la mayoría de veces cuando trabajamos para una empresa o proyecto privado, carecemos de un seguro de una AFP, de esos beneficios que la ley debería darnos, pero para un artista independiente es muy difícil” aseguró el artista.

La Ley de la Cultura en su artículo 91 reconoce al artista como trabajador, asegurando que todos los artistas que desarrollen sus actividades bajo cualquier modalidad, serán considerados trabajadores de la cultura, con el fin de que puedan gozar los derechos que son inherentes a la condición de trabajador.
No obstante, en El Salvador la falta de reconocimiento al trabajo artístico es un problema que al día de hoy atañe a los trabajadores del arte. Según Marvin este desconocimiento a la labor de los artistas es un problema sistemático.
“Para mí es a una sociedad a la que no se le enseña a valorar el trabajo artístico, no es culpa de una persona que no valore el trabajo de un artista, sino de un sistema educativo al que no le interesa fomentar un espíritu crítico del arte, es justo esto lo que conlleva a que el artista no sea valorado dignamente”.

En 2021 la Asamblea Legislativa aprobó reformar el artículo 3 de la Ley de Cultura, redefiniendo el concepto de “artista”, el cual ahora se extiende e incluye todas las formas de expresión cultural. Además, a finales de 2022 el Ministerio de Cultura lanzó el Registro Nacional de los Trabajadores de la Cultura y el Arte, una iniciativa que, según la cartera de Estado, busca identificar, dignificar y promover al sector artístico y cultural salvadoreño.

Estos proyectos representan avances en el reconocimiento de los artistas como trabajadores, aun así, según Eggly Larreynaga, actriz y gestora cultural, este reconocimiento debe ir más allá de lo simbólico para dignificar el arte con un valor económico.
“La labor de muchos artistas no es valorada, y cuando hablo de valor hablo de un valor económico, porque este es el que hace que tu te puedas profesionalizar y dedicar a algo. El hecho que yo te dé un diploma o un aplauso forma parte de una gratitud o reconocimiento, pero para que el trabajo sea valorado, como otro trabajo y se le de la importancia, debe haber un valor económico” aseguró la artista.
