El Louvre parisino ha inaugurado una gigantesca base de datos que permite ver de forma gratuita y en varios idiomas todo el conjunto de sus colecciones. Así, por primera vez, una pieza podrá ser vista en gran formato y con reseñas ilustradas, sin importar si se encuentra en sala, oculta en depósito o en otras instituciones.
Admirar las piezas más bellas del Museo del Louvre sin moverse de la sala, ya es posible. El célebre museo francés, el más visitado del mundo, ha puesto en abierto una nueva base de datos en la que todas las obras de sus colecciones, estén expuestas o no, son accesibles de forma gratuita a través de Internet.
“Esta es una etapa iniciada desde hace numerosos años atrás que tiene como objetivo servir tanto al público general como al público de los investigadores. La accesibilidad está en el corazón de nuestras misiones”, ha señalado en videoconferencia el presidente y director del Louvre, Jean-Luc Martinez.
Esta nueva página incluye desde ya más de 482.000 reseñas ampliamente ilustradas, lo equivalente a tres cuartas partes de las explicaciones sobre las colecciones, sustituyendo así a la antigua base ‘Atlas’, cuya capacidad se limitaba solo a las obras expuestas.
Con todo, la plataforma Collections.louvre.fr permitirá a la vez profundizar sobre obras emblemáticas y mirar por ejemplo series arqueológicas fragmentarias de antigüedades griegas. Como apuntaba Martinez, en ella los amantes del arte y sus investigadores podrán desde hacer consultas hasta recorridos, pasando por las reseñas y otras herramientas.
Asimismo, el sitio web dispondrá de las piezas del Museo Delacroix –dependiente del Louvre–, de esculturas del jardín de las Tullerías, y de obras recuperadas en Alemania desde 1945 y confiadas al Museo en espera de ser devueltas a su propietario expoliado. Siempre teniendo en cuenta que cualquier pieza, esté en sala o en depósito, incluso bajo resguardo de otras instituciones y reservas, o aquellas almacenadas en el nuevo centro ultramoderno de Liévin (Paso de Calais), estarán a un solo clic.
A esta plataforma se añade además otra nueva para el Louvre, con una voluntad visual, mayor inmersión y mejor narrativa, tanto en imágenes como en video. Accesible en francés, inglés, chino y, lo que nos interesa, español, ha estado concebida para un mejor uso práctico en tabletas y teléfonos móviles, ya que los estudios revelaron que el 60% de las consultas se hacían por estos medios. Aún así, está igualmente pensada para los escolares y todos los turistas extranjeros, que suelen visitar el Louvre con entradas generalistas.
“Había una especie de apetito del público por la narrativa (en torno a las obras y al museo) a la que hemos respondido”, ha explicado Dominique de Font-Réaulx, director de mediación y de programación cultural, añadiendo que “se le dio un gran lugar a la imagen fija y animada (para acompañar estas historias en el museo más grande del mundo”.
Pese al cierre por la pandemia de Covid-19, el año del Louvre ha estado marcado por una explosión de las visitas y una consolidación en redes sociales, con 21 millones de espectadores virtuales en ‘louvre.fr’ y 10 millones de suscriptores.