El Madrid liquida a su rival con un cuarto de hora arrollador y suma los primeros tres puntos de la temporada
Deportivo Alavés y Real Madrid disputaban esta noche la primera jornada de La Liga Santander en Mendizorroza.
Los blancos daban el pistoletazo de salida a la temporada 2021/22 tratando de dominar el juego y encerrar a su rival, pero la resistencia del cuadro blanquiazul no permitió ver la mejor versión de los merengues en la primera mitad. Esto cambiaría en la segunda mitad, cuando un tanto tempranero de los madridistas enterraba las ilusiones vascas y abría espacios en la zaga rival.
Primera parte: Ganas e intensidad, pero sin ocasiones
El Real Madrid saltaba hoy al terreno de juego en la vuelta de Carlo Ancelotti al banquillo merengue con la intención de arrancar la competición con buen pie. Los blancos iniciaron el encuentro ubicados en 1-4-3-3, con Bale y Alaba como principales novedades.
Por su parte, el Deportivo Alavés salía hoy con un once muy ofensivo y con ganas de aguar la fiesta a los madrileños en su debut. Iniciando en 1-4-2-3-1, los vitorianos presionaron muy arriba durante los primeros compases del encuentro y llegaron incluso a disputarle el control del esférico a su rival.
Poco a poco el Madrid fue imponiendo su condición de favorito y se hizo con el dominio de la posesión. Hazard, mucho más liberado hoy, abandonaba constantemente el carril izquierdo, que quedaba libre para las carreras de David Alaba, y aparecía por dentro para generar superioridad ante el doble pivote vasco.
También Gareth Bale por derecha tuvo tendencia durante la segunda mitad del primer tiempo a centrar su posición para armar el golpeo, pero los intentos del galés no lograron poner en apuros a Fernando Pacheco.
El Alavés fue cambiando poco a poco su ritmo de juego y la presión arriba se convirtió en un repliegue rápido que atascaba a los merengues en la frontal del área blanquiazul y permitía a los locales salir al contraataque.
En este escenario de partido iba a ganar peso la figura de Manu García. El canterano se desenvolvió con soltura en la mediapunta del conjunto vitoriano y aportó criterio a los ataques de los suyos cada vez que entraba en contacto con el balón.
Precisamente de una apertura del joven centrocampista iba a nacer la ocasión más clara del partido. Edgar Méndez encontraba espacios a la espalda de la zaga en banda derecha y sacaba un centro al área que era desbaratado por Lucas Vázquez. Sin embargo, el despeje del gallego quedaba mordido en el interior del área y Pere Pons, entrando desde segunda línea, mandaba el cuero por encima del travesaño.
Los blancos continuaron buscando con insistencia la meta rival y llegaron a embotellar a su rival en algunas fases del encuentro atacando con muchos hombres y confiando en la anticipación de espaldas de sus hombres más defensivos, pero el buen posicionamiento de la zaga blanquiazul les impidió generar ocasiones de peligro en la primera mitad.
Segunda parte: Los blancos liquidan el encuentro con un cuarto de hora brillante
El Madrid salió con contundencia tras el paso por vestuarios y con el público todavía volviendo a sus asientos ponía ya el primer tanto en el marcador.
Lucas Vázquez ponía atrás un buen cambio de orientación de Bale y Hazard mataba el cuero de espuelas en la frontal del área pequeña para que Benzema fusilara al guardameta.
El Alavés quiso reaccionar tras el mazazo y dio un paso al frente adelantando la posición de su doble pivote para volver a presionar arriba la salida de balón blanca. Sin embargo, esto abriría espacios a la espalda de la zaga vitoriana y los madrileños supieron interpretar el cambio de guion acelerando el ritmo del juego para buscar transiciones ofensivas mucho más veloces.
En el minuto 55 de partido, una jugada ensayada desde el cuarto de círculo diestro llegaba a las botas de Modric, que cerraba el cuero al interior del área pequeña en lo que parecía un envío franco para el guardameta. Sin embargo, Nacho se anticipaba a Pacheco y a su marcador y ampliaba la ventaja lanzándose en plancha al remate.
El segundo tanto deshilachaba por completo el entramado defensivo de los hombres de Javi Calleja y daba a los merengues la posibilidad de mostrar su mejor versión en ataque de la mano de Eden Hazard y Karim Benzema. Belga y francés tomaron el mando de las ofensivas blancas y volvieron loca a la zaga rival permutando completamente entre las posiciones de ataque.
El doble pivote del Alavés se rompió para intentar controlar los movimientos de los atacantes, y Valverde aprovechaba los espacios por dentro para arrancar desde campo propio, romper a la defensa rival en potencia y sacar un centro atrás para que Benzema firmara su doblete y anotara el tercer tanto madridista.
Con el encuentro ya visto para sentencia, un error de Militao volvía a meter a los vitorianos en el partido. Guidetti anticipaba una cesión atrás del brasileño y obligaba a Courtois a derribarlo en el área de castigo para evitar el tanto. Joselu tomaba la responsabilidad de golpear y recortaba distancias desde los once metros con un remate potente al costado izquierdo de la portería.
Tras 20 minutos frenéticos que marcaron el inicio de la segunda mitad, el Madrid se hizo con el monopolio absoluto del balón y marcó el compás del juego con comodidad en la recta final del encuentro.
Las entradas de Vinicius y Rodrygo modificaron el plan de partido de los merengues, que buscaron mucho más el juego por los costados y confiaron el centro del campo a la potencia de Valverde en conducción y la toma de decisiones de Luka Modric.
Ya en el descuento, un buen envío de Alaba desde el pico izquierdo del área grande lo cabeceaba Vinicius en boca de gol para anotar el cuarto tanto de los suyos y cerrar el partido.
Tras una segunda mitad muy entretenida, el pitido del colegiado marcaba el final del encuentro con resultado final de 1-4 y situaba a los madridistas en lo más alto de la tabla clasificatoria.