Patitos de felpa invaden San Salvador
En el marco de los Festejos Agostinos, San Salvador ha sido testigo de una inusual invasión de patitos amarillos, que han capturado la atención de residentes y visitantes por igual. Este accesorio, conocido como “ganchito de patito”, ha sido adoptado por niños, mujeres y hombres, convirtiéndose en una de las principales atracciones de las festividades.
El ganchito de patito, compuesto por un pequeño patito de felpa sujeto a un resorte, ha adornado cabezas y gorras durante los desfiles del Correo y del Comercio. Los vendedores de estos accesorios han tenido un éxito rotundo, con precios que oscilan alrededor de $1.00.
La tendencia de los patitos amarillos no se limita a los desfiles. En el Centro Histórico de San Salvador, se observa una proliferación de estos accesorios, importados desde China. Los patitos vienen en varias versiones, incluyendo diseños con coronitas, corazones, flores, moños y gafas oscuras. Además de los ganchitos, también se venden diademas adornadas con estos elementos.
Origen y Significado de la Tendencia
El origen de esta moda es incierto, pero podría derivar de influencias asiáticas, como el animé japonés, o de Filipinas y China. En Asia, el amarillo simboliza felicidad y energía positiva, mientras que en Taiwán se considera un símbolo de buena suerte, reflejado en un evento con un pato de goma gigante. La estética kawaii de Japón también contribuye a su popularidad, añadiendo un toque de ternura e inocencia. Así, los patitos amarillos en San Salvador no solo son una moda viral, sino también un símbolo de alegría y buena energía.