El Estado brasileño de Río Grande do Sul se encuentra enfrentando intensas lluvias e inundaciones que han azotado la región en los últimos días, dejando 29 personas muertas y 60 desaparecidas, según el reporte de Defensa Civil del estado.

Los fallecimientos se han registrado en 19 municipios de Río Grande do Sul, siendo Gramado el más afectado con cuatro muertes, mientras que Candelária encabeza la lista de localidades con más desapariciones, con ocho personas aún sin ser encontradas, según informó Defensa Civil.

Por otro lado, el gobernador de Río Grande do Sul, Eduardo Leite, mantuvo una reunión con el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, para abordar la situación y definir acciones para enfrentarla. Durante el encuentro, Leite describió los acontecimientos como “un desastre histórico”.

“Los daños materiales son enormes, pero nuestro enfoque en este momento está en los rescates. Todavía hay gente esperando ayuda”, expresó Leite, según otro comunicado del gobierno estatal.

Finalmente, entre las medidas acordadas por los gobiernos federal y estatal se encuentra el establecimiento de una Sala de Situación que coordine las operaciones de rescate, en un esfuerzo conjunto por hacer frente a la emergencia y brindar apoyo a las comunidades afectadas por las inundaciones en Río Grande do Sul.