La vacaciones de Semana Santa esta vez serán diferentes ya que alrededor del mundo se conoció la nueva enfermedad de Covid-19 y las personas deben de tener sumo cuidado al salir a tener esparcimiento familiar en las diversas playas de El Salvador.
Sin embargo, en las Playas de la Libertad todavía es un mínimo numero de veraneantes, pero los pocos salvadoreños que habían llegado para disfrutar del sol, la arena y el mar, en su mayoría no respetaban las medidas de bioseguridad recomendadas por las autoridades para evitar la propagación del Covid-19.
Y aunque se ha dispensado del uso en círculos familiares, socorristas de Comandos de Salvamento aseguraron que han hecho hincapié en la protección, siempre que una persona se movilice de un lugar a otro o se acerque a un comerciante u otro desconocido.
La razón es que en personas ajenas del grupo familiar se desconoce sí emplean medidas de bioseguridad, el estado de salud y el entorno en que se ha movido en los últimos días.
El comportamiento mostraban los vendedores formales (de ranchos) e informales; quienes no guardaban la distancia reglamentaria ni llevaban puesta la protección en sus rostros.
“Del fin de semana para acá la afluencia de turistas en la playa El Majahual se ha mantenido en un 50% y 60%. Este día (martes) se observa que está aumentando la afluencia, esperamos que la gente siga los protocolos, aplicando las indicaciones de los guardavidas y equipo de atención hospitalaria en la playa”, manifestó William Saldaña, jefe de puesto de playa El Majahual.
El socorrista comentó que en los ranchos se están aplicando las medidas de prevención contra el covid-19,
“pero mucha población visitante está llegando sin mascarilla y nosotros como Comandos les recomendamos que de favor al venir a las playas recuerden que el covid todavía existe en el país y que está causando muchas muertes”, afirmó Saldaña.
“Entendemos que cuando se bañan no pueden usar mascarilla, pero al caminar por la playa sí deben utilizarla para evitar contagio masivo”. William Saldaña, jefe de puesto de Comandos de Salvamento en playa El Majahual.
Los vendedores formales e informales reconocen el riesgo de infectarse y aunque saben cómo minimizarlo, atribuyen a las altas temperaturas, la incomodidad y la falta de presión de las autoridades para aplicar el protocolo de prevención contra el virus mortal.