La diputada chilena Ximena Ossandón pidió disculpas por la participación de dos de sus hijos en una controvertida fiesta clandestina, que ya ha causado 20 contagios de covid-19, en Chachagua, un balneario acomodado de la comuna de Zapallar, en Valparaíso.
Durante su participación en un programa de Chilevisión, la parlamentaria de Renovación Nacional dijo que lo ocurrido era una “tremenda vergüenza”. “No tengo mucho que decir, sino que pedir disculpas a las personas que se sienten ofendidas”, expresó la legisladora.
“Ojalá que la juventud que tiene tantos privilegios empiece a pensar más en los demás y no solo en ellos mismos”, añadió.
20 contagiados en la fiesta
El ministro de Salud, Enrique París, confirmó el contagio de 20 personas tras la fiesta clandestina. Además, se investiga la cepa genética del virus para determinar su nivel de contagiosidad y qué tipo de medidas deben tomarse.
Del mismo modo, manifestó que los organizadores fueron denunciados y que se tomarán “las acciones legales pertinentes”, informa BioBio.
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Por su parte, la subsecretaria de Salud Pública, Paula Daza, ha pedido a los padres que se comuniquen con sus hijos para “hacerles entender la importancia y la gravedad de lo que significa la participación en estos eventos sociales”.
Esta fiesta ocurre en medio de una nueva ola de coronavirus en Chile, donde los casos positivos han aumentado en un 25 % en los últimos siete días, según informó el Ministerio de Salud.
Cuestionamientos
El también denominado ‘Chachagua gate’ ha generado duras críticas debido al supuesto tratamiento preferencial que han recibido los participantes de la fiesta, convocada por redes sociales y celebrada en una mansión de la costa chilena.
En esta reunión multitudinaria, donde no se respetaron las normas de distanciamiento social, participaron hijos de empresarios y de diputados chilenos. Tras la llegada de Carabineros al lugar, por quejas de “exceso de ruido”, nadie resultó detenido.
Sin embargo, en otras fiestas clandestinas recientes, como las realizadas en Las Condes y en Ñuñoa, localidades de Santiago, la intervención de los agentes se saldó con 150 personas aprehendidas.
Respuesta de las autoridades
Al respecto, la subsecretaria de Prevención del Delito, Katherine Martorell, dijo que las “penas mayores” caerán sobre los organizadores, mientras que los asistentes son “sujetos de sumarios sanitarios“, lo que según ella, “va más allá de la privación de libertad, con multas que pueden superar los 50 millones de pesos” (70.000 dólares).
Por su parte, el director de Carabineros, Ricardo Yáñez, ha pedido que “más allá de analizar los procedimientos, el punto hay que ponerlo en las personas que son irresponsables“.
“Vamos a estar donde la gente nos llame, vamos a proceder de la misma manera: deteniendo cuando haya que detener y notificando donde solo estén los responsables del lugar”, aseveró.
Estos eventos ocurren durante el llamado Plan Verano Seguro, organizado por el Gobierno para impulsar el turismo en país suramericano, en medio de medidas de reforzamiento de la presencia policial en los lugares vacacionales.
Desde el inicio de la pandemia, Chile ha reportado 641.923 casos confirmados de covid-19 y un total de 17.096 fallecidos.
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