El presidente brasileño, Jair Bolsonaro, renovó este miércoles su Gobierno con cambios en dos ministerios y sancionó una ley que dota de autonomía al Banco Central, la cual enmarcó en su objetivo de liberalizar la economía del país.
“Se renuncia a un poder”, como el que hasta ahora ejercía el Gobierno sobre el Banco Central y la política monetaria, en favor de un “esfuerzo democrático” y un proyecto general que apunta a generar confianza en los inversores, dijo el mandatario.
Jair Bolsonaro Presidente brasileño
Bolsonaro aprovechó la ocasión para insistir en que su decisión de cambiar al presidente de la estatal Petrobras no ha supuesto una “injerencia” en los negocios de la petrolera, una percepción que se asentó en los mercados financieros y derrumbó las acciones de la compañía en las bolsas de Sao Paulo, Nueva York y Madrid.
Para reemplazar al actual presidente de Petrobras, el economista Roberto Castello Branco, ha propuesto al general de la reserva del Ejército Joaquim Silva e Luna, cuyo nombramiento debe ser analizado por la asamblea de accionistas de la empresa.
La ley sancionada por Bolsonaro fue aprobada la semana pasada y desvincula al Banco Central del Ministerio de Economía, del que dependía hasta ahora, para convertirlo en una autarquía autónoma, que tendrá la responsabilidad de diseñar la política monetaria.
El proyecto mantiene la forma en que es designado el presidente del Banco Central, que seguirá siendo propuesto por el Ejecutivo y sometido a la aprobación del Congreso.
Sin embargo, establece como novedad un mandato de cuatro años para el presidente de la entidad, que empezará en el tercer año en el poder del jefe de Estado de turno, con la posibilidad de una única reelección por el mismo periodo de tiempo.
Según el presidente del Banco Central, Roberto Campos Neto, con esa ley que da autonomía al emisor, Brasil se suma a los países “más modernos”, que “tienen una menor inflación”, que “es el más perverso de los impuestos”, y son “más previsibles” para los inversores.
Los cambios
En el mismo acto, el diputado Onyx Lorenzoni asumió la Secretaría General de la Presidencia y entregó al también diputado Joao Roma el cargo de ministro de Ciudadanía que ocupaba hasta ahora.
Lorenzoni es dirigente de Demócratas (DEM), una formación de derechas que junto con el Partido Republicano (PR), al que pertenece Roma, forma parte del llamado “centrón”, variopinto grupo de fuerzas conservadoras que controla el Parlamento y en los últimos meses se ha aproximado al Gobierno que lidera Bolsonaro.
Como nuevo secretario general de la Presidencia, Lorenzoni tendrá la responsabilidad de la articulación con el Parlamento, en tanto que Roma, como ministro de Ciudadanía, manejará unos presupuestos multimillonarios y controlará los programas sociales del Gobierno.
El presupuesto del despacho de Roma incluso deberá ser ampliado en las próximas semanas, con la aprobación de un nuevo subsidio para las clases más pobres del país, que el Parlamento ya debate para ayudar a paliar los efectos de la pandemia de coronavirus.
Los partidos que componen el llamado “centrón” han garantizado su apoyo al Gobierno de Bolsonaro, quien sobre esa base política deberá preparar la coalición con la que aspirará a renovar su mandato de cuatro años en las elecciones presidenciales de octubre de 2022.
