El expresidente de Brasil, Jair Bolsonaro, fue ingresado el viernes 11 de abril en un centro sanitario de Natal (noreste) debido a fuertes dolores abdominales, relacionados con las secuelas de un ataque con cuchillo sufrido en 2018.

Por su parte, el senador Rogerio Marinho, del Partido Liberal (PL), anunció que Bolsonaro será trasladado el este sábado a un hospital en Brasilia, donde recibirá atención de un equipo médico que lo ha seguido durante varios años.

El exmandatario, de 70 años, sufre una obstrucción subintestinal, un problema recurrente desde el atentado. A pesar de la gravedad de los síntomas, el equipo médico del centro sanitario de Natal indicó que no se requiere cirugía en este momento.

Rogerio Marinho señaló que Bolsonaro se encuentra consciente, tranquilo y en condición estable.

Este traslado se produce en medio de un contexto político complejo para Bolsonaro, quien enfrenta un juicio por supuesta participación en una trama golpista tras las elecciones de 2022.

Además, fue declarado inelegible hasta 2030 debido a sus declaraciones sobre el sistema electoral de Brasil.