Colin Pitchfork, un hombre que fue condenado en 1988 a cadena perpetua con un mínimo de 30 años de prisión por violar y asesinar a dos adolescentes en el Reino Unido, será liberado a pesar de que el Gobierno impugnó la decisión anterior de la Junta de Libertad Condicional, informa el periódico Metro.
El condenado, que actualmente tiene 60 años, violó y estranguló en 1983 y 1986 a dos jóvenes de 15 años, Lynda Mann y Dawn Ashworth, en el condado inglés de Leicestershire. Tras declararse culpable de dos asesinatos, dos violaciones, dos atentados al pudor y conspiración para distorsionar el curso de la justicia, se convirtió en el primer asesino del mundo sentenciado utilizando pruebas de ADN.
En el 2009, su condena fue reducida a 28 años, y a partir del 2018 ha estado disfrutando de un régimen de prisión abierta.
Mientras, el pasado marzo la Junta de Libertad Condicional dictaminó que era “apto para ser liberado”. Como la decisión de la junta es provisional, el secretario de Justicia británico, Robert Buckland, instó en junio al órgano, que es independiente del Gobierno, a que volviera a examinar el fallo bajo el llamado ‘mecanismo de reconsideración’.
Este martes, la Junta de Libertad Condicional anunció que la solicitud de Buckland fue “rechazada”. “La Junta de Libertad Condicional tiene una inmensa simpatía por las familias de Dawn Ashworth y Lynda Mann y reconoce el dolor y la angustia que han soportado y siguen soportando a través del proceso de libertad condicional”, afirmó.
Detalló que la institución “está obligada por ley a evaluar si un preso está en condiciones de ser liberado” y su decisión “debe basarse exclusivamente en el riesgo que un preso puede suponer al ser liberado y si ese riesgo puede ser gestionado en la comunidad”. “Como quedó claro en la decisión de reconsideración, la liberación fue apoyada por todos los testigos del secretario de Estado durante la revisión del caso de Pitchfork”, agregó.
Buckland declaró que la decisión de liberar a Pitchfork era “irracional“, porque el panel de la junta “no dio razones suficientes” de por qué estaba de acuerdo con las pruebas aportadas por los testigos profesionales.
La madre de Dawn Ashworth calificó de “decepcionante” la liberación del asesino de su hija.
Por su parte, el juez Michael Topolski, que revisó la decisión para la junta, afirmó que no consideraba que el fallo fuera “irracional” y concluyó que la “solicitud de reconsideración es rechazada”. “Este fue y sigue siendo un caso de considerable gravedad, complejidad y notoriedad. Las terribles consecuencias de las brutales violaciones y asesinatos de dos niñas inocentes oscurecerán para siempre la vida de las familias afectadas”, añadió.
