La culpable de haber participado en el asesinato de Leno LeBianca, y Rosemary en 1969, puede salir en libertad condicional luego de 53 años en prisión.

La secta de Charles Manson fue un grupo muy popular en los años 60. “La Familia”, como se hacían llamar, crearon una atmósfera de terror en el área metropolitana de Los Ángeles, Estados Unidos.
Charles Manson, quien fue líder de este culto, tenía muchas mujeres seguidoras. Entre ellas Leslie Van Houten.
Hace 50 años, Leslie comenzó a experimentar con diferentes drogas como marihuana, el hachís y el LSD. El uso de estas fue el camino para conocer a esta secta que era conocida por normalizar y promover el consumo de estas.

Van Houten se hizo creyente de los pensamientos que promulgaba Charles Manson, quien hacía un llamado a la revolución y la violencia; también a ser participantes de la guerra racial, que según Manson, estaba a punto de pasar.
Leslie fue partícipe del asalto a la casa de la pareja, y testigo del asesinato de Leno LeBianca; además, fue la responsable de propinar 16 puñaladas a Rosemary; muriendo en el lugar causa de las heridas.
“Tomé uno de los cuchillos, Patricia tenía otro, y empezamos a apuñalar y cortar a la señora”
testificó Van Houten.
Siendo así condenada el 29 de marzo de 1971 a la pena de muerte.
53 años de cárcel se han cumplido desde el suceso, Leslie ha estado recluida en la prisión de mujeres de Chino, California.
En un nuevo juicio celebrado este mes, el tribunal inferior de California falló a favor de Leslie Van Houten, otorgándole la libertad condicional.
Los abogados de ella, aseguran que no es la misma persona. Dicen que su evolución como persona ha sido evidente por medio del logro una licenciatura y un máster universitario.
Sin embargo, los familiares de las víctimas y el gobernador del estado de California, siguen considerándola un peligro para la seguridad de los ciudadanos.