El almacenamiento seguro empieza con los hábitos en la cocina. No solo se trata de saber dónde guardar la comida, sino conocer cuál es su duración en estos lugares.
Los alimentos entran en contacto con el aire y, después de un tiempo, se alteran y cambian de aspecto, olor y sabor. Así, la carne se pudre, las frutas frescas fermentan y el pan toma un color oscuro verdoso. Para evitar que esto suceda, se deben guardar y proteger a fin de que duren más tiempo y no pierdan su valor nutritivo, según el blog Nutrición, práctica y saludable.
El método de la refrigeración
La mayoría de los productos y alimentos que compramos terminan en el refrigerador. Dependiendo del tipo la duración varía: la carne o los productos lácteos tienen una vida más larga en comparación a los vegetales. El uso del frío como sistema de conservación de desarrolló en 1840 por el cocinero francés, Nicolás Appert.
Este método parte de tres fundamentos:
- Disminuir la velocidad de las reacciones químicas y bioquímicas de degradación al bajar la temperatura.
- Inhibir la proliferación microbiana a bajas temperaturas. Por debajo de -10 ºC no pueden desarrollarse.
- Por debajo de 3 ºC los microorganismos dejan de producir las toxinas responsables de las toxiinfecciones.
En el caso del hogar, las temperaturas idóneas para conservar los alimentos en el refrigerador son debajo de los -18 ºC en el congelador y en la nevera, entre 1 y 4 ºC en el caso de las carnes y pescados y entre 5 y 8 ºC para el resto de alimentos.
Tiempos de conservación
Frutas y verduras frescas: estos alimentos duran más de siete días en la nevera, ello depende del grado de maduración y su composición. Lo más recomendable es consumirlos pronto ya que pierden nutrientes con el tiempo.
Huevos: tienen una duración de 3 a 5 semanas en el refrigerador. Las claras o yemas crudas tienen un tiempo de vida de 2 a 4 días, por lo que debes consumirlos con rapidez.
Lácteos: estos productos son pasteurizados por lo que suelen tener una duración de 10 días o varias semanas. Si la leche es ultra pasteurizada no requiere de refrigeración mientras este cerrado. Una vez que abras el envase, el tiempo de conservación cambia y debes almacenarlo en la nevera.
Quesos: los más frescos o con mayor grado de humedad pueden permanecer en buenas condiciones por 20 días aproximadamente. Los quesos semicurados o curados duran mucho más tiempo y puedes guiarte por la fecha en el envase.
Carnes frescas: La carne de res, cordero, cerdo, ternera u otra carne roja puede permanecer entre 3 y 5 días. El pollo y el pavo duran uno o dos días. Estos tiempos aumentan considerablemente si los almacenas en el congelador.
Pescados y mariscos: los pescados blancos, azules y mariscos duran 1 o 2 días. El pescado ahumado, gracias a su contenido en sodio, se conserva por 14 días.