El NHC alerta que lo más fuerte de la temporada aún está por venir

El Centro Nacional de Huracanes (NHC, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos advirtió este martes que la temporada ciclónica en el Atlántico aún no ha mostrado su máximo potencial, pese a un arranque considerado “relativamente tranquilo”.
Brad Reinhart, especialista sénior del NHC, señaló que la historia demuestra que cerca del 60 % de la actividad ocurre después del pico climatológico de la temporada, que se alcanza cada 10 de septiembre. “No estamos todavía fuera de peligro”, subrayó en un mensaje en video.
Hasta ahora, el Atlántico ha registrado seis sistemas tropicales: el huracán Erin y las tormentas Andrea, Barry, Dexter, Fernand y Chantal. Esta última fue la única en impactar Estados Unidos, dejando dos víctimas mortales en julio en Carolina del Norte.
La Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA) había pronosticado una temporada superior a lo normal, con entre 13 y 18 tormentas tropicales, de las cuales entre cinco y nueve podrían convertirse en huracanes.
Andrew Hagen, otro especialista del NHC, recordó que en 2023 tres huracanes tocaron tierra en Estados Unidos después del pico de la temporada: Francine, Helene y Milton. Estos últimos dos causaron más de 250 muertes y daños estimados en 120.000 millones de dólares en el sureste del país.
Hagen añadió que la actividad tardía suele concentrarse en la parte occidental de la cuenca atlántica, donde se generan los sistemas con mayor impacto en tierra firme.
En contraste, la temporada en el Pacífico, que inició el 15 de mayo, ha registrado 12 tormentas con nombres como Alvin, Bárbara, Cosme, Dalila y Lorena. Solo Erick tocó tierra el 19 de junio como huracán categoría 3 en el sur de México, donde dejó un menor fallecido y afectaciones a la infraestructura en Oaxaca y Guerrero.