Hoy se jugó en Old Trafford el partido entre Manchester United y Everton, correspondiente a la fecha 7 de Premier League
La fecha 7 de Premier League arrancó con uno de los duelos más memorables de las últimas décadas; Manchester United recibiría al Everton de Rafa Benítez para dar inicio a la jornada. Los mancunianos llegaban a esta nueva jornada luego de haber ganado in extremis ante el Villarreal con el gol de Cristiano Ronaldo en el último lugar. La situación del United era más complicada de lo que parecía; el equipo había perdido ante el Aston Villa en la fecha 6 en casa luego del penal errado de Fernandes. Ahora, los de Solskjaer necesitaban encontrar una idea de juego amarrada a las victorias, pero el Everton no la pondría fácil.
Los de Benítez llegarían a Old Trafford luego de una victoria en la última fecha ante el Norwich, quien marchaba último y sin haber sumado puntos aún. El Everton tendría un duro examen ante un club plagado de estrellas que siempre es de cautela. Los Toffes se mantenían en la parte alta de la tabla, pero para este encuentro no contarían con Calvert-Lewin, Richarlison, Andre Gomes ni Coleman. Las bajas eran sumamente sensibles para el equipo, el capitán y los delanteros estrellas estarían fuera para enfrentar al siempre peligroso Manchester United. Ahora, visitaban a los red devils y prometían un encuentro que sacaría chispas entre ambas escuadras.
Primer tiempo
El primer tiempo inició con el dominio del local, quienes tocaban la pelota en todo el campo y trataban de llegar con balón dominado y por medio de paredes al área. La primera del partido vino por medio de un centro por derecha de Wan-Bissaka que encontró a Martial, rematando de cabeza, pero se fue desviado. El Everton aún no lograba meterse de lleno en el encuentro y tenía muchos problemas para salir jugando de su campo. Los de Benítez raramente tenían la pelota, mientras que el Manchester era el dominador de la posesión y trataba de generar peligro por medio de las bandas. Los de Solskjaer tenían el dominio, pero aún no lograban rematar al arco e incomodar a Pickford.
La balanza de empezaba a equilibrar poco a poco, y era el Everton quien trataba de atacar por medio de balones a Rondón, Townsend y Gray. El Manchester United atacaba con más armas y la banda derecha de Wan-Bissaka y Greenwood era su favorita para enviar centros. Fernandes hacía un desgaste tremendo ayudando en defesa y liberando espacios para Cavani, pero el Everton era un cerrojo abajo. El United avisó, Fred metió un centro dirigido a la cabeza de Cavani, quien remató bajo, pero Pickford atajó enviando el balón fuera y ahogando el grito de gol en Old Trafford.
El Manchester rompe el cántaro
El partido continuaba y la tónica era más que marcad: Los de Solskjaer moviendo el balón, circulando y buscando espacios mientras desahogaban. Los de Benítez esperando salir desde atrás con líneas compactas y presionando la salida del rival. El United tenía problema para dar el último toque de cara al arco de Pickford; los Toffes atacaban por medio de centros, pero Varane y Lindelöf los cortaban oportunamente. Los visitantes tenían una que otra para explotar su juego y hacían trabajar a De Gea, la defensa de los red devils tenían problemas cuando les disparaban de lejos.
El juego del United pasaba por las bandas cuando Fernandes se asociaba por los costados, pero rápidamente les llegaba la doble marca. El Everton veía su única arma por medio de centros retrasados que fueran al pie del compañero. Doucouré tuvo un disparo peligroso de larga distancia, pero fue bloqueado por Wan-Bissaka a tiempo para anular el peligro de los de Benítez. El partido llegaba a su fase final de este primer tiempo y ya había bajado las revoluciones, pero por momentos el Manchester le ponía vértigo al ataque y ponía en aprietos a la defensa rival. El marcador al final se abrió, Fernandes la cedió sutilmente en los linderos del área para Martial quien remató a quemarropa hacia Pickford, gritando su primer gol de la campaña. El primer tiempo finalizó con la victoria parcial del Manchester gracias al gol de Martial, pero daba la sensación que la segunda parte deparaba más goles.
Segundo tiempo
El segundo tiempo inició con una calca del cómo había terminado la primera parte; el Manchester era quien dominaba y marcaba el ritmo del juego, el Everton por su parte, esperaba con líneas compactas y con doble presión a las bandas. El partido tomaba un sazón adicional cuando ingresaron Sancho y Cristiano Ronaldo para ganar más peso en la parte de ataque del equipo. Los cambios vinieron por dos de los más destacados de la primera parte: Cavani y Martial, saliendo éstos ovacionados por el público de Old Trafford. El Everton se estaba disipando aún más en este inicio del complemento, y ahora, encontraba menos espacios para salir.
Sancho ingresó encendido y cada pelota que tenía era de peligro, causaba estragos en la banda izquierda y era quien más se asociaba con Cristiano. El Everton cortó un tiro de esquina y por medio de una sublime transición hallaron el gol por medio de Townsend. El inglés empataba las cosas de nuevo y era un respiro de aire fresco para los Toffes en su peor momento del partido. Las cosas regresaban para nada para nadie en Old Trafford y ahora, se regresaba al mismo plano de ante; el Manchester volcado en ataque y el Everton retraído en su campo.
Nada para nadie en Old Trafford
El partido empezaba a equilibrarse, los de Solskjaer jugaban y combinaban hasta la media cancha, y arriba, les costaba combinar con Cristiano Ronaldo. Solskjaer ingresó a Pogba para dar mayor acompañamiento a Bruno y poner más presión en tres cuartos de cancha. El Everton mantenía su planteamiento y por medio de la banda de Gray, era por donde se gestionaba el peligro. Los de Benítez parecían cómodos con sacar el empate del partido, pero era todo lo contrario para los locales quienes asediaban el arco rival constantemente. Los red devils intentaban sus ataques por la banda de Sancho por medio de centros, pero no resultaban efectivos.
El United trataba de hacer daño al arco de Pickford cuando Sancho interiorizaba y se asociaba o ya bien, con Fernandes o Pogba. Los de azul amparaban a otra jugada similar cómo a la del gol, pero ahora el Manchester estaba más cauteloso a esas jugadas. El partido se jugaba en terreno azul, con Wan-Bissaka y Shaw jugando como extremos abiertos por las bandas, dando más peso al ataque. El Everton había conseguido el segundo gol por medio de Yerri Mina, pero éste estaba en fuera de juego, anulando instantáneamente el gol. El partido finalizó en Old Trafford con un amargo empate para los locales que no vivían su mejor momento, pero un empate con sabor a victoria para el Everton.
