Dentro de esas historias que son fascinantes y que merecen ser contadas, narramos esta vez cómo los científicos descubrieron que la Tierra como la conocemos llegó a enfriarse debido a la mortandad que supuso la colonización y la conquista de América.
Huelga aclarar que esta investigación fue hecha en 2019 desde una perspectiva científica pero que nos hace pensar en cómo algunas decisiones o acciones de los seres humanos afectan las condiciones del planeta.
Lo que se conoce que en los 100 años que siguieron a la llegada de los europeos a finales del siglo XV, América, durante la Colonización, la población indígena de América se redujo de 60 millones a solo 6 millones, según estimaciones, debido a oleadas de epidemias, guerras y hambrunas, principalmente. Tampoco hay que olvidar que en muchos lugares las poblaciones indigenas fueron diezmadas por poblaciones mestizas o europeas como generalmente se cuenta, hay casos de etnocidios en diferentes países de América y cada persona de cada país a lo mejor recordará alguna en algún libro de historia.
Algunos expertos se refieren a esto como la “Gran Mortandad”, situación que transformó el medio ambiente y provocó el enfriamiento del clima de la Tierra, según la investigación de 2019 publicada en Quaternary Science Reviews.
En concreto, el equipo de investigadores encargado del estudio, del University College de Londres de Reino Unido, afirmó que las perturbaciones que siguieron a la colonización europea provocaron que una enorme franja de tierras agrícolas abandonadas fuera reclamada por árboles y otra vegetación de rápido crecimiento. Esto arrastró suficiente dióxido de carbono (CO2) a la atmósfera como para enfriar el planeta.
Según explican, la temperatura media descendió 0,15 °C a finales del siglo XVI y principios del XVII, contribuyendo a lo que se conoce como la Pequeña Edad de Hielo, un periodo entre 1300 y 1870 aproximadamente en el que los inviernos congelaban a Europa.
“La Gran Mortandad de los pueblos indígenas de las Américas provocó el abandono de una cantidad suficiente de tierras desbrozadas como para que la absorción de carbono terrestre resultante tuviera un impacto detectable tanto en el CO2 atmosférico como en las temperaturas globales del aire en superficie”, estimó el autor principal del estudio, el doctorando Alexander Koch, del Colegio Universitario de Londres (UCL).
-“Gran Mortandad” y descenso de niveles de CO2
En cuanto a la franja de tierras agrícolas abandonadas que tomabamos de ejemplo de por que ocurría el descenso de los niveles de CO2 en esas épocas, según los cálculos del equipo, 56 millones de hectáreas quedaron en desuso en esa franja de tiempo. Es decir, en 100 años, situación que explicaría el descenso. Por su parte la estimación de los científicos del equipo del University College de Londres de que la población nativa americana en 1492 d.C. era de 60,5 millones se basó en registros históricos como el tamaño de los ejércitos, datos censales y hallazgos arqueológicos. Explican que, durante el siglo siguiente, los agentes patógenos recién introducidos acabaron con el 90% de la población. Algo que debe tenerse en cuenta ya que las epidemias como nos demuestra la historia reciente son francamente mortales y hace 100 años serían aún peores sin mayores avances en medicina, entre otros campos. En el registro de los núcleos de hielo de la Antártida <las burbujas de aire atrapadas en estas muestras congeladas muestran un descenso en su concentración de dióxido de carbono>, los investigadores observaron un descenso del CO2 en la época de la Pequeña Edad de Hielo. -Colapso de la población indígena La BBC de Londres, relata a través de Ed Hawkins, profesor de climatología de la Universidad de Reading, en Berkshire, que no participó en el estudio, los científicos han entendido convencionalmente que la llamada Pequeña Edad de Hielo fue causada por varios factores, como un descenso de los niveles atmosféricos de dióxido de carbono, grandes erupciones volcánicas, cambios en el uso de la tierra y una disminución temporal de la actividad solar. Agregó Hawkins, (esto) demuestra que el descenso del CO2 se debe, en parte, al asentamiento de las Américas y el consiguiente colapso de la población indígena. Esto, asegura, permitió el rebrote de la vegetación natural y demuestra que las actividades humanas afectaron al clima mucho antes de que comenzara la revolución industrial. <En esa época de 1500 a 1600 se produce un enfriamiento acusado que se denomina Pequeña Edad de Hielo, y lo interesante es que podemos ver que los procesos naturales dan un poco de enfriamiento, pero en realidad para conseguir el enfriamiento completo, el doble de los procesos naturales, hay que tener esta caída de CO2 generada por el genocidio>, dijo, por su parte, Maslin, otro autor. También estos investigadores hablaron que con esto se tienen magnitud de cómo afecta esto al cambio climático y se cita “Lo que se desprende de este estudio es la magnitud de lo que se necesita para mitigar el cambio climático. La Gran Mortandad hizo que se reforestara una superficie del tamaño de Francia y eso solo nos dio unas pocas ppm. Esto demuestra que la reforestación puede ayudar a atajar el futuro cambio climático, pero solo hasta cierto punto”, dijo el Dr. Chris Brierley (Geografía UCL), coautor del estudio. “Ese tipo de reducción equivale quizá a solo dos años de emisiones de combustibles fósiles al ritmo actual”, agregó.