El exdiputado y expresidente de la Asamblea Legislativa, Sigfrido Reyes Morales, enfrenta desde este martes una audiencia preliminar en el Juzgado Segundo de Instrucción de San Salvador, junto a otras 13 personas. La Fiscalía General de la República (FGR) los acusa de lavado de dinero y de activos, estafa agravada y peculado.

La diligencia judicial, que se extenderá por al menos dos semanas, busca establecer la validez y utilidad de las pruebas presentadas por la FGR durante la etapa de instrucción. En la primera jornada se discutieron incidentes procesales y se presentaron los alegatos de apertura por parte de la fiscalía y las defensas.

De acuerdo con el dictamen fiscal, Reyes se habría apropiado indebidamente de $126,609.13 en viáticos mientras ejercía su cargo como diputado, fondos provenientes de la Asamblea Legislativa. Además, se le acusa de participar en la adquisición fraudulenta de inmuebles del Instituto de Previsión Social de la Fuerza Armada (IPSFA), causando un perjuicio de más de $395,000 a dicha institución.

La Fiscalía también sostiene que entre 2006 y 2019, Reyes Morales registró un incremento patrimonial no justificado por $472,142.88.

Entre los implicados figuran el hermano del exdiputado, Earle Reyes Morales; el exasesor y exsocio Byron Enrique Larrazábal; tres exempleados de la Corte de Cuentas y tres trabajadores del IPSFA, incluido el gerente general de la institución.

Las autoridades judiciales analizarán si existen suficientes elementos probatorios para que los imputados enfrenten un juicio formal por los delitos señalados.