La presidenta del Tribunal Supremo Electoral (TSE), Dora Esmeralda Martínez, anunció en una entrevista que se está llevando a cabo una auditoría forense al sistema de transmisión de actas electorales utilizado en las elecciones del 4 de febrero. El objetivo principal de esta investigación es determinar las causas que llevaron a los inconvenientes durante el escrutinio preliminar de dichas votaciones.

Martínez, destacó que actualmente no puede confirmar si el sistema experimentó una falla total, ya que la auditoría está en curso para analizar a fondo el problema. Sin embargo, señaló que se logró transmitir un total de 6,015 actas, lo que sugiere que no todas las funciones del sistema fallaron.

Durante el escrutinio preliminar del 4 de febrero, se pudo transmitir aproximadamente el 70 % de las actas de la elección presidencial. Sin embargo, debido a fallos técnicos, la transmisión del 30 % restante se detuvo, lo que impidió llevar a cabo el escrutinio preliminar para la elección legislativa.

La presidenta del TSE explicó que la auditoría forense determinará si la falla fue atribuible al sistema, a problemas de conectividad o a deficiencias logísticas. También mencionó la posibilidad de que algunos miembros de las Juntas Receptoras de Votos (JRV) no hayan seguido el plan de contingencia proporcionado por el TSE.

Martínez resaltó que, a pesar de las dificultades, no hubo descuidos en la custodia de los paquetes electorales, asegurando que fueron debidamente resguardados durante su traslado desde los centros de votación hasta la bodega donde se almacenaron, y luego hacia el Gimnasio Nacional para el escrutinio final.

Finalmente, informó que los resultados de la auditoría forense determinarán si el sistema de transmisión está en condiciones de ser utilizado en los comicios municipales y parlamentarios programados para el próximo 3 de marzo.