El ex candidato a la presidencia, Joel Sánchez, ha sacudido el panorama político de El Salvador al hacer públicas acusaciones de extorsión por parte del partido dirigido por Carlos García Saade.

Según las revelaciones de Sánchez, altos miembros del partido tricolor exigieron la desmesurada suma de $30 millones como requisito para financiar la campaña electoral de 2024. La negativa de Sánchez a cumplir con esta demanda resultó en un boicot por parte de García Saade y otros miembros del partido, minando así su propia candidatura.

Sánchez señaló específicamente a Efraín Cañas, ex candidato a alcalde de San Salvador Sur, como el intermediario que le solicitó la cifra millonaria, respaldado por el presidente del COENA, Carlos García Saade. Las amenazas de expulsión del partido en caso de no cumplir con la exigencia fueron constantes, llegando al extremo de ser hostigado en cuatro ocasiones para obtener el dinero.

En una entrevista reveladora en “Las Cosas como Son”, Sánchez destacó la pasividad de García Saade ante las amenazas proferidas por Cañas, evidenciando así la complicidad de altos funcionarios del partido en este presunto acto de extorsión.

El ex aspirante presidencial también afirmó que fueron los líderes de ARENA quienes organizaron los encuentros para demandar los fondos necesarios para la campaña electoral, arrojando una sombra de duda sobre la integridad del partido tricolor.

Estas acusaciones han generado un profundo cuestionamiento en la esfera política salvadoreña, con llamados a investigaciones exhaustivas y demandas de rendición de cuentas por parte de la ciudadanía.