El último informe sobre la libertad de prensa en El Salvador, presentado por el Centro de Monitoreo de Agresiones contra Periodistas de la Asociación de Periodistas de El Salvador (APES), revela una alarmante tendencia al alza en las agresiones contra periodistas y medios de comunicación en el país.

Según el informe correspondiente al año 2023, las agresiones aumentaron de 187 a 311 casos, lo que representa un incremento del 66.3%. Estas agresiones abarcan diversas formas, incluyendo intimidaciones, retenciones arbitrarias, agresiones verbales, amenazas legales, vigilancias, difamaciones, entre otras.

Más de la mitad de estas agresiones son atribuidas al Estado, con funcionarios públicos y miembros de instituciones estatales como los principales agresores. Destaca la presencia de figuras políticas prominentes en el listado de agresores, entre ellos el diputado Christian Guevara y el presidente Nayib Bukele.

El informe también resalta la situación del periodismo comunitario, con casos de acoso constante durante la cobertura, especialmente por parte de elementos de la Fuerza Armada. La radio Izcanal, por ejemplo, enfrenta incertidumbre legal debido a la falta de autorización para su funcionamiento por parte de las autoridades competentes.

La detención del periodista Víctor Barahona, quien sufrió torturas físicas y psicológicas durante su cautiverio, ilustra la gravedad de la situación y sus impactos devastadores en la vida de los profesionales de la prensa.

En resumen, el informe subraya la creciente vulnerabilidad de los periodistas y medios de comunicación en El Salvador, así como la necesidad urgente de proteger la libertad de prensa y garantizar un ambiente seguro para el ejercicio del periodismo en el país.