La Asamblea Legislativa aprobó el lunes 15 de abril, que la Dirección General de Energía, Hidrocarburos y Minas tenga la facultad de definir cómo fijará las tarifas de energía para el usuario final hasta el 14 de julio de 2025. Esta medida llega después que venciera el decreto que congeló las tarifas de energía en octubre del año pasado.

Las distribuidoras de energía deberán ajustar los precios y publicar las tarifas a usuario final según lo determine la Dirección, que además estará facultada para recopilar información necesaria. El Ministerio de Hacienda emitirá “notas de crédito del tesoro público” para absorber la diferencia respecto al aumento del precio real de la energía y evitar el impacto en los usuarios finales.

El nuevo decreto, titulado “Disposiciones transitorias para la definición del cargo por energía a facturar a los usuarios finales”, establece un mecanismo de fijación de tarifas discrecional por parte de la Dirección, siendo de orden público y aplicable retroactivamente. Se espera un aumento significativo en el precio de la energía, según datos de la Unidad de Transacciones, que señalan un incremento del 22% en el precio del megavatio hora desde octubre de 2023.