El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, negó este viernes que se estén cometiendo errores en la deportación de migrantes hacia El Salvador, luego de haber invocado la Ley de Enemigos Extranjeros para expulsar a cientos de personas en el marco de una medida amparada en su autoridad en tiempos de guerra.

“Me dijeron que pasaron por un riguroso proceso de investigación, y que este continuará en El Salvador”, declaró Trump desde la Oficina Oval, tras ser consultado sobre si todos los deportados estaban vinculados a la pandilla venezolana Tren de Aragua.

El mandatario calificó al grupo como “un mal grupo” que se encontraba en “áreas malas” y en compañía de personas “absolutamente asesinas, homicidas y con los peores antecedentes que hayan visto”.

Mientras tanto, las familias de los migrantes afectados buscan respuestas. En Carrollton, Texas, Yurliana Andreina Chacín Gómez rompió en llanto al enterarse de que su hermano, Jhon Willian Chacín Gómez, fue deportado a El Salvador. Su esposo, Reynaldo Ávila, intentó consolarla mientras la familia cuestiona la legalidad y el fundamento del proceso.

“Y si existiera un error así, sin duda querríamos averiguarlo. No queremos cometer ese tipo de errores”, añadió Trump.