Las Fuerzas Armadas de Taiwán están en alerta tras denunciar el “acoso militar” por parte de china que incursionó con cientos aviones militares en las inmediaciones de la isla. El Ministerio de Defensa de la isla planteó claramente la necesidad de advertir a su Ejército “para hacer frente a cualquier contingencia”.
En un comunicado, el ministerio de Defensa en Taipéi remarcó que sus fuerzas deberán sostener el principio de “prepararse para la guerra sin buscarla, responder a la guerra sin evitarla”. Defensa manifestó que la paz y la estabilidad en el estrecho de Taiwán son “responsabilidad compartida de todas las partes involucradas” y que el acoso militar de China puede generar “un aumento de la tensión” y “deteriorar la seguridad regional”.
Por este motivo, la isla exigió a Pekín a “asumir su responsabilidad” y a “detener de inmediato este tipo de acciones unilaterales y destructivas”. Este comunicado del gobierno de la isla surgió después que esta experimentara una cifra récord de incursiones de aviones y buques de guerra chinos. En total, se contabilizaron entrando cerca de las orillas de Taiwán 103 aeronaves y 9 navíos del Ejército Popular de Liberación.
Por su parte el estrecho de Taiwán es una demarcación no oficial aceptada tácitamente por Taipéi y también por Pekín sin embargo en las últimas décadas los cazas chinos acostumbran ya a ultrajar desde hace un año en sus incursiones. La portavoz de la Cancillería china Mao Ning según citan algunos medios habría dicho en una conferencia de prensa “no existe” tal línea media y que Taiwán es “parte del territorio chino”.
Este tipo de incursiones chinas se han vuelto costumbre ya que el gigante asiático las realiza en repetidas ocasiones y son frecuentes las denuncias taiwanesas.
Solo la semana del 11 de septiembre, se reportaron alrededor de 200 aviones y 50 barcos de guerra procedentes del otro lado del Estrecho, lo que fue un incremento de la tensión que coincide con el reciente paso del portaaviones chino Shandong por las aguas al este del territorio taiwanes.
