El presidente de Rusia, Vladímir Putin, y su homólogo húngaro, Viktor Orbán, ha mantenido una reunión este lunes en Pekín, donde los días 17 y 18 de octubre se celebra el foro internacional de la Franja y la Ruta.
“A pesar de que en las condiciones geopolíticas actuales las oportunidades para mantener contactos y desarrollar relaciones son muy limitadas, no puede no ser motivo de satisfacción que nuestras relaciones con muchos países europeos se mantengan y se desarrollen. Uno de estos países es Hungría”, dijo por su parte Putin durante el encuentro.
Según sus palabras, en las últimas décadas las relaciones entre Rusia y Hungría se construyeron “únicamente teniendo en cuenta los intereses de cada uno, basándose en todo lo positivo que heredamos del pasado”. “El año pasado hubo un aumento significativo en la cooperación comercial y económica: más del 80%”, sostuvo Putin.
Y agregó “Desafortunadamente, este año hemos visto, en los primeros siete meses, una disminución del 35%”, lamentó, agregando que se trata de un indicio de que “hay razones para pensar qué más se puede hacer para influir positivamente en este proceso”.
Ambos líderes han coincidido en Pekín, donde, según Orbán, han mantenido la que es ya la décimo tercera reunión bilateral desde 2009. Sin embargo, nunca ha habido “una situación más difícil”, en palabras del primer ministro húngaro, según la agencia de noticias TASS.
Budapest, de hecho, busca mantener “la mejor comunicación” con Moscú, alejado por tanto de la doctrina política mayoritaria en Europa y que pasa por romper lazos con la Rusia de Putin.
Orbán ha demostrado ser en este último año su principal aliado dentro de la UE y ha cuestionado la eficacia de las sanciones, cuyo alcance también ha buscado limitar.
Un portavoz de Orbán ha confirmado que en el encuentro también se ha hablado de Ucrania y el primer ministro de Hungría ha subrayado “la importancia de la paz” y ha solicitado el fin del conflicto.
-Críticas estadounidenses
Esta es la primera reunión de un líder occidental o Europeo con Putin desde que la Corte Penal Internacional (CPI) ordenara su arresto el pasado mes de marzo, por el supuesto traslado forzoso de niños ucranianos.
El embajador estadounidense en Budapest, David Pressman, lamentó que Orbán “elija aliarse con un hombre cuyas fuerzas son responsables de crímenes contra la humanidad”, lo que le deja “solo” también entre los Estados miembro de la OTAN.
“Mientras Rusia ataca a civiles ucranianos, Hungría implora acuerdos comerciales”, criticó Pressman en X.