Protestas en Río de Janeiro tras redada policial
Decenas de personas salieron a las calles de Río de Janeiro para protestar contra el uso excesivo de la fuerza por parte de la policía, luego de una redada que dejó al menos 119 muertos en comunidades empobrecidas de la ciudad.
Los manifestantes, en su mayoría residentes de las favelas de Penha y Complexo do Alemão, exigieron la renuncia del gobernador estatal, Claudio Castro, y pidieron información sobre las víctimas.
Frente a la sede del Gobierno, los residentes gritaron “¡asesinos!”, y ondearon banderas brasileñas manchadas de rojo en señal de protesta. Horas antes, familiares y vecinos habían colocado decenas de cuerpos en una de las calles principales de Penha para denunciar la magnitud del operativo.
De acuerdo con las autoridades, la redada que movilizó a unos 2,500 policías y soldados, tenía como objetivo a la organización criminal Comando Vermelho. El secretario de la policía estatal, Felipe Curi, informó que se decomisaron más de 90 fusiles y una tonelada de drogas, además de confirmar 113 arrestos.
Sin embargo, las versiones oficiales fueron cuestionadas por residentes y activistas, quienes denunciaron ejecuciones extrajudiciales y manipulación de pruebas.
Por otro lado, el juez del Supremo Tribunal Federal, Alexandre de Moraes, ordenó al gobernador Castro rendir cuentas sobre la operación y asistir a una audiencia el próximo lunes junto a los jefes de la policía militar y civil. Por su parte, la fiscalía federal solicitó garantizar que las autopsias incluyan documentación completa y pruebas gráficas de las lesiones.



