Cientos de manifestantes salieron este domingo a las calles de Morelia, capital del estado de Michoacán, para exigir justicia por el asesinato de Carlos Manzo Rodríguez, alcalde de Uruapan, quien fue atacado a balazos durante un evento por el Día de Muertos.

Los asistentes a la marcha también demandaron la renuncia del gobernador Alfredo Ramírez Bedolla y expresaron su descontento con consignas como “¡Justicia!” y “¡Uruapan se levantó!”. Parte del grupo ingresó al Palacio de Gobierno estatal, donde causaron daños materiales. La policía reportó ocho personas detenidas.

De acuerdo con el secretario de la Defensa Nacional, Ricardo Trevilla, el edil contaba con protección oficial desde diciembre de 2024, pero había decidido mantener seguridad inmediata a cargo de la policía municipal y no de la Guardia Nacional, que solo brindaba vigilancia perimetral.

El secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Omar García Harfuch, informó que no hubo registros previos ni filtraciones del ataque, aunque señaló que el crimen estaría relacionado con el crimen organizado.

La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, calificó la movilización como una manifestación pacífica, pero criticó a lo que llamó “un grupo muy provocador” que irrumpió en el Palacio de Gobierno. Además, aseguró que habrá “cero impunidad” en la investigación del asesinato del alcalde de Uruapan.