Nuevo mandatario Guatemalteco anuncia cambios y solicitará la renuncia de la Fiscal General Consuelo Porras
Bernardo Arévalo, el presidente recién juramentado de Guatemala, inició su mandato anunciando medidas para combatir la corrupción e impunidad en las instituciones. Durante su primera jornada, expresó su agradecimiento al Ejército por su imparcialidad durante la crisis política que rodeó su investidura.
En un evento público, Arévalo destacó la resistencia demostrada durante los últimos 203 días y elogió la profesionalización y compromiso de los soldados hacia la bandera, la patria y la Constitución. Por primera vez, la ceremonia de revisión militar se llevó a cabo en la Plaza de la Constitución en lugar de una instalación militar.
Arévalo, bajo amenaza de persecución penal desde junio, enfrentó obstáculos, incluidos intentos de inhabilitar a su partido y desafíos en el traspaso de mando. A pesar de ello, logró asumir el cargo con el respaldo de los pueblos indígenas y el reconocimiento del nuevo Congreso.
En el acto solemne en el Teatro Nacional, Arévalo aseguró que no permitiría que las instituciones se sometieran nuevamente a la corrupción e impunidad. Declaró que la crisis política ofrecía la oportunidad de construir una institucionalidad democrática sólida y saludable.
Entre sus primeras acciones, Arévalo anunció que solicitará la renuncia de la fiscal general Consuelo Porras, sancionada por Washington por corrupción y por socavar la democracia. Estados Unidos también negó el acceso a Alejandro Eduardo Giammattei Cáceres, hijo del expresidente Giammattei, como parte de las medidas para defender la democracia.