Un hombre de nacionalidad holandés, identificado como Marco Ebben, de 32 años, fue baleado en un edificio residencial de Atizapán de Zaragoza, en el estado de México, a unos 25 kilómetros de la capital.

En redes sociales circularon imágenes del cuerpo sin vida del holandés en un estacionamiento privado, en medio de dos camionetas, cuando aún no se había confirmado su identidad.

Sin embargo, peritos de la Fiscalía General de la República confirmaron la identidad de la víctima, según un funcionario de la Fiscalía del Estado de México, quien pidió la reserva de su nombre por no estar autorizado para declarar sobre el caso.

De acuerdo con la información, el ahora fallecido, fingió su muerte en octubre pasado en Culiacán, para evadir a las autoridades.

No obstante, los medios mexicanos recordaron que no se presentaron pruebas de su fallecimiento, excepto el testimonio de una supuesta novia que dijo haber reconocido el cadáver.

Según versiones de prensa, Ebben tenía vínculos con el grupo de Zambada, quien en julio de 2024 denunció haber sido secuestrado y trasladado en un avión privado a Estados Unidos por un hijo de Joaquín “El Chapo” Guzmán, condenado a cadena perpetua en ese país.

Ebben era un hombre que estaba en la lista de los delincuentes más buscados por Europol y tenía una condena de siete años de prisión por narcotráfico.