El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, quien llegó a Rusia el martes junto a una delegación venezolana, reiteró el interés de su país en unirse a los BRICS, el grupo de economías emergentes conformado por Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica.

Durante el encuentro, Putin manifestó su apoyo a la aspiración de Venezuela de integrarse al bloque. Recientemente, los BRICS incorporaron a Irán, Etiopía, Emiratos Árabes Unidos y Egipto, aunque Venezuela quedó fuera de esta última expansión.

Celso Amorim, asesor del presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva para Asuntos Internacionales, declaró que no apoyaba la entrada de Venezuela en este momento. “Creo que hay que ir despacio. No sirve de nada llenar los BRICS de países, de lo contrario pronto se creará un nuevo G-77”, afirmó Amorim.

Pese a la postura de Brasil, Maduro reiteró el compromiso de Venezuela con los principios de los BRICS y aseguró que el país sigue en el “camino del equilibrio del mundo”, alineándose con el objetivo de crear un orden mundial más justo y menos dependiente de las sanciones internacionales.

Por otro lado, el presidente venezolano subrayó que su gobierno continúa trabajando para que Venezuela se convierta en parte de los BRICS y para fortalecer sus relaciones con los países miembros, al tiempo que busca diversificar sus alianzas económicas y políticas.