La Fiscalía General de Jalisco desmintió las versiones que indicaban la existencia de crematorios clandestinos en un rancho de la zona rural del municipio de Teuchitlán, donde se encontraron restos humanos calcinados.

La noticia fue anunciada en un comunicado oficial de la fiscalía, que señaló que en las inspecciones realizadas en el rancho Izaguirre no se encontraron estructuras que pudieran haber funcionado como hornos.

A pesar de la declaración sobre la inexistencia de crematorios clandestinos, las autoridades confirmaron el hallazgo de objetos personales en el lugar, incluidos cientos de zapatos, prendas y otros objetos, que podrían estar relacionados con personas desaparecidas.

Este hecho fue inicialmente denunciado por la organización civil Guerreros Buscadores, quienes encontraron los restos humanos el pasado 5 de enero y denunciaron la presencia de lo que presuntamente eran crematorios.

El rancho, que ya había sido inspeccionado en septiembre de 2024, ha sido objeto de un escrutinio minucioso desde que se conoció la denuncia. A pesar de que en la inspección anterior no se encontraron los restos humanos calcinados, la fiscalía local informó que se utilizaron nuevas herramientas tecnológicas para agilizar las investigaciones en el sitio.

De esta manera, en Jalisco se enfrenta una grave crisis de desapariciones forzadas. Se estima que alrededor de 15.000 personas han desaparecido en la entidad, muchas de ellas presuntamente víctimas de la delincuencia organizada.

Como respuesta, organizaciones civiles de Jalisco y otros estados del país han convocado una jornada de protestas bajo la consigna de “luto nacional”, exigiendo justicia y la presentación con vida de los desaparecidos.

Finalmente, Jalisco, como muchas otras regiones de México, continúa siendo uno de los epicentros de la violencia relacionada con el narcotráfico y la delincuencia organizada.