Un juez federal del estado de California decidió extender el Estatus de Protección Temporal (TPS) para cerca de 60,000 migrantes originarios de Honduras, Nicaragua y Nepal que residen actualmente en Estados Unidos, otorgándoles una prórroga a su permiso para vivir y trabajar legalmente en el país.

La decisión fue anunciada este jueves 31 de julio y frena la expiración inminente del TPS para aproximadamente 7,000 ciudadanos de Nepal, cuyo beneficio vencía el 5 de agosto, así como para unos 51,000 hondureños y casi 3,000 nicaragüenses, quienes enfrentaban la finalización del programa el 8 de septiembre.

El fallo judicial representa un alivio temporal para miles de familias que se encontraban en incertidumbre ante las medidas adoptadas por la administración del presidente Donald Trump, la cual ha buscado restringir el acceso al TPS, argumentando que las condiciones que justificaron su otorgamiento han cambiado.

Durante su mandato, la administración Trump ha cancelado el TPS a centenares de miles de personas provenientes de países como Ucrania (160,000), Venezuela (350,000) y Haití (más de 500,000), medidas que han sido cuestionadas por organizaciones proinmigrantes y algunos tribunales.

Los beneficiarios del TPS, que en muchos casos han vivido por décadas en Estados Unidos, seguirán protegidos por esta figura migratoria mientras continúan los procesos judiciales que podrían determinar su futuro legal en ese país.