El director general del Ministerio de Asuntos Exteriores de Israel, Jacob Blitstein, reprendió a los embajadores de España, Irlanda y Noruega tras el anuncio de estos países de reconocer el Estado palestino, decisión que será formalizada el próximo 28 de mayo.
En una reunión celebrada en la sede del Ministerio israelí de Asuntos Exteriores, Blitstein expresó su desaprobación ante la decisión de los gobiernos europeos, calificándola de “retorcida” y alegando que supone una recompensa para el grupo Hamás. “La decisión retorcida de sus gobiernos es una recompensa para Hamás y Hamás les felicita por ello”, afirmó Blitstein, según un comunicado de la institución.
De esta manera, Blitstein advirtió de las posibles repercusiones de esta decisión sobre las relaciones bilaterales con los países representados por los embajadores: la española Ana Salomón, la irlandesa Sonya McGuiness y el noruego Per Egil Selvaag. “Tendrá consecuencias más graves para nuestras relaciones con sus países”, advirtió.
Durante la reunión, los embajadores europeos fueron confrontados con un vídeo divulgado recientemente, en el que se muestra a milicianos de Hamás entrando en una base militar de observación en Nahal Oz, cerca de la Franja de Gaza, y capturando a varios soldados. “El reconocimiento de sus gobiernos no promueve la paz y da un impulso a Hamás, dificultando aún más la promoción de un acuerdo para la liberación de rehenes”, insistió Blitstein.
Por otro lado, el diplomático israelí subrayó la firme posición de Israel de no cesar su operación militar en Gaza hasta cumplir sus objetivos: “acabar con Hamás, el regreso de todos los secuestrados y el retorno de la seguridad para todos sus ciudadanos”.
Así mismo, el ministro de Exteriores de Israel, Israel Katz, calificó la decisión de los países europeos como un “premio a los terroristas de Hamás”, mientras que el primer ministro Benjamín Netanyahu afirmó que “al mal no se le puede entregar un Estado”.
Finalmente, la decisión de España, Irlanda y Noruega ha generado una profunda tensión diplomática, marcando un nuevo capítulo en la compleja situación del conflicto israelí-palestino y las relaciones internacionales.
