Un hombre del norte de California, de 30 años, que sufría una crisis de salud mental murió días después de que los agentes de policía se arrodillaran sobre su nuca durante casi cinco minutos para someterlo, dijeron los abogados de su familia.
Angelo Quinto había estado «sufriendo de ansiedad, depresión y paranoia durante los meses anteriores», dijeron los abogados de su familia en una demanda por homicidio culposo, presentada el 18 de febrero.
Su hermana, Isabella Collins, llamó a la policía a su casa en Antioch, California, el 23 de diciembre, porque temía que él lastimara a su madre, dijo el abogado de la familia, John L. Burris, durante una conferencia de prensa, el 18 de febrero.
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Antes de que llegara la policía, la madre de Quinto lo había sostenido contra su pecho con las manos entrelazadas alrededor de su espalda durante unos minutos y «él ya había comenzado a calmarse», decía la denuncia. Cuando llegaron dos agentes del Departamento de Policía de Antioch, Burris dijo que no hicieron ningún intento por comprender la situación y, en cambio, inmediatamente tomaron a Quinto de los brazos de su madre.
Quinto perdió el conocimiento y fue trasladado a un hospital local, donde fue declarado muerto tres días después, dicen los abogados de familia en la demanda.
María Quinto-Collins, la madre de Quinto, usó su teléfono celular para registrar parte del incidente.
«¿Qué pasó?», dice sin aliento cuando se ve a Quinto inmóvil y acostado de frente. Los agentes lo giran para sacar su cuerpo y su rostro está ensangrentado. Lo llevan a una camilla y los paramédicos administran compresiones torácicas a Quinto mientras su madre graba en su teléfono, haciendo preguntas.
No quedó claro en el video si los agentes llevaban cámaras corporales.
«Hasta donde sabemos, no», dijo Burris, la semana pasada.
Madre y hermana de Quinto.
La muerte de Quinto, sin investigaciones
En los casi dos meses transcurridos desde la muerte de Quinto, la Policía no ha emitido un comunicado de prensa sobre el incidente. El Departamento de Policía de Antioch y la División Forense del Sheriff del Condado de Contra Costa no respondieron a las solicitudes de comentarios, el lunes.
«Estos agentes de la Policía de Antioch ya habían esposado a Angelo pero no detuvieron su asalto al joven e inexplicablemente comenzaron a usar la técnica de ‘George Floyd’ de colocar una rodilla en la parte posterior y lateral de su cuello, ignorando las súplicas del Sr. Quinto de ‘ por favor, no me maten’”, dijo Burris.
La causa de la muerte de Quinto aún está pendiente, dijo el lunes la Oficina Forense del Sherif del Condado de Contra Costa a CNN. Su muerte está siendo investigada por la Oficina del Fiscal de Distrito del Condado de Contra Costa.
Isabella Collins dijo que llamó a la policía con la esperanza de que ayudaran a calmar la situación.
«No creo que nunca me vaya a sentir mal», le dijo a KGO, afiliada de CNN. «Si fuera lo correcto, no habría muerto mi hermano».
El secretario de la ciudad de Antioch y la Oficina del Fiscal no respondieron a las solicitudes de comentarios.
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