Francia vive este viernes su primera ola de calor de 2025, con temperaturas superiores a los 35 ºC, en lo que las autoridades meteorológicas califican como un fenómeno inusualmente temprano e intenso.

Según la agencia Météo-France, el evento afecta principalmente al oeste del país, donde los termómetros podrían alcanzar entre 36 ºC y 38 ºC este fin de semana, cifras que superan en diez grados las temperaturas normales para esta época del año.

El pico de calor se espera para el sábado, justo en la celebración de la Fiesta de la Música, tradicional jornada de conciertos al aire libre en todo el país.

“Esta ola de calor es notable por su precocidad, pero también por su intensidad“, afirmó Tristan Hamm, portavoz de Météo-France, a la agencia AFP.

Las autoridades han activado alertas por altas temperaturas en varias regiones y han recomendado medidas de protección, especialmente para niños y adultos mayores.

Varias ciudades han extendido la apertura de parques, se han adaptado las jornadas laborales en sectores como los viñedos, y algunas escuelas cancelaron actividades al aire libre.

Las noches también se prevén cálidas, lo que podría afectar la calidad del sueño y aumentar los riesgos para la salud, especialmente en personas vulnerables.

Météo-France recordó que las últimas tres olas de calor registradas antes del 21 de junio han ocurrido en lo que va del siglo XXI, lo cual refleja una tendencia creciente atribuida al cambio climático.

El sábado, la ola de calor se extenderá por todo el territorio francés, y en algunas zonas podría alcanzar los 39 ºC, lo que ha llevado a las autoridades a instar a la población a hidratarse constantemente, evitar la exposición al sol en las horas de mayor calor y cuidar de los más frágiles.