El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció este viernes desde el Despacho Oval de la Casa Blanca un importante evento relacionado con el fútbol y, en tono de broma, preguntó si podía quedarse con el trofeo dorado del Mundial.

El sorteo de la primera Copa del Mundo con 48 selecciones se realizará en la sede de una reconocida institución cultural, a la que Trump busca reformar, considerando sus políticas de diversidad como demasiado “woke”, un término crítico usado por sectores de la derecha. Durante el anuncio, el mandatario calificó el evento como “el más grande y probablemente el más importante”, acompañado por Gianni Infantino, presidente de la FIFA, y vistiendo una gorra con la frase “Trump tenía razón en todo”.

El Mundial de 2026 será el primero que se dispute en tres países distintos, y Trump ha destacado su relevancia por celebrarse durante su mandato. Infantino, que mantiene buena relación con el presidente, llevó el trofeo para la ocasión y permitió que Trump lo tocara, algo poco común, explicando que normalmente solo los presidentes de la FIFA, los jefes de estado y los ganadores tienen ese privilegio.

Trump, levantando el trofeo entre risas, preguntó: “¿Puedo quedármelo?”, mientras el funcionario de la FIFA recordaba que es una pieza de oro muy valiosa. Aunque parecía una broma, el trofeo del Mundial de Clubes ha permanecido en el Despacho Oval más de un mes después de que el Chelsea inglés lo ganara en East Rutherford, cerca de Nueva York.