Autoridades mexicanas informaron que se encontró un túnel clandestino de 350 metros de longitud que conecta la ciudad fronteriza de Tijuana con San Diego, Estados Unidos, presuntamente utilizado para actividades de tráfico de drogas y personas.

El descubrimiento fue realizado por elementos del Ejército mexicano y agentes policiales, quienes localizaron el paso subterráneo dentro de una vivienda particular, en la que también se encontraron dosis de metanfetamina, según detalló la Secretaría de Seguridad federal en un comunicado oficial.

El operativo fue ejecutado en coordinación con autoridades estadounidenses, según explicó Laureano Carrillo, secretario de Seguridad del Estado de Baja California.

La zona fronteriza entre ambos países, que se extiende por unos 3,100 kilómetros, ha sido históricamente utilizada por organizaciones criminales para evadir los controles fronterizos mediante este tipo de construcciones ilegales.

El hallazgo se da en un contexto de presión diplomática y operativa, en el que el gobierno mexicano ha intensificado los esfuerzos para frenar el tráfico ilegal, tras amenazas del presidente estadounidense Donald Trump de imponer aranceles a México por no contener el flujo de drogas y migrantes indocumentados hacia el norte.

Las autoridades mexicanas no reportaron detenidos en el operativo, pero aseguraron que se continúa investigando para identificar a los responsables de la excavación y del uso del túnel.