Corea del Norte ha entregado más de 1.000 contenedores de equipo militar y municiones a Rusia en las últimas semanas para su uso en Ucrania, dijo el viernes la Casa Blanca.
La declaración se produce un mes después de que el líder norcoreano, Kim Jong Un, viajara al lejano oriente de Rusia y se reuniera con el presidente Vladimir Putin, lo que generó preocupación entre los aliados de Kiev sobre la posibilidad de un posible acuerdo de armas.
“Condenamos a la RPDC por proporcionar a Rusia este equipo militar, que será utilizado para atacar ciudades ucranianas, matar a civiles ucranianos y promover la guerra ilegítima de Rusia”, dijo a los periodistas el portavoz de seguridad nacional de la Casa Blanca, John Kirby, utilizando el nombre oficial de Corea del Norte.
“Continuaremos monitoreando cualquier envío adicional de armas de la RPDC a Rusia”.
A cambio de su apoyo, dijo Kirby, “Pyongyang está buscando asistencia militar de Rusia, incluyendo aviones de combate, misiles tierra-aire, vehículos blindados, equipos de producción de misiles balísticos u otros materiales y otras tecnologías avanzadas”.
“Esta asociación militar en expansión entre la RPDC y Rusia, incluida cualquier transferencia de tecnología de Rusia a la RPDC, socava la estabilidad regional y el régimen global de no proliferación”, añadió.
Según un gráfico proporcionado por la Casa Blanca, entre el 1 de septiembre y el 1 de octubre se envió por mar un cargamento de contenedores desde Najin, Corea del Norte, hasta Dunay, Rusia.

Luego fueron entregados por ferrocarril a un depósito de municiones cerca de Tikhoretsk, en el suroeste de Rusia, a unos 290 kilómetros (180 millas) de la frontera con Ucrania.
Corea del Norte, a quien Estados Unidos ha acusado anteriormente de suministrar proyectiles al Grupo Wagner de Rusia, es un productor en masa de armamento convencional y se sabe que posee grandes reservas de material de guerra de la era soviética, aunque en condiciones desconocidas.
Rusia ha aumentado la producción de proyectiles este año hasta una previsión de 2,5 millones, pero los analistas han sugerido que podría no cubrir sus necesidades en el campo de batalla.
Las fuerzas de Moscú disparan alrededor de 60.000 disparos por día, según cifras ucranianas.
Si bien Rusia dijo que no se firmaron acuerdos durante la visita de Kim, Putin dijo que veía “posibilidades” de cooperación militar.
Rusia y Corea del Norte, aliados históricos, están bajo una serie de sanciones globales: Moscú por su invasión de Ucrania y Pyongyang por sus pruebas de armas nucleares.
Kirby dijo que las entregas de Corea del Norte violan las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU “por lo que continuaremos planteando agresivamente estos acuerdos de armas en la ONU junto con nuestros aliados y socios”.
