Las autoridades de Colombia confirmaron que 15 menores han muerto en operaciones militaresejecutadas desde agosto, en el marco de bombardeos contra campamentos de grupos armados. La información fue actualizada tras nuevas verificaciones y ha generado cuestionamientos hacia el presidente Gustavo Petro.

Los datos más recientes se conocieron luego del ataque del 10 de octubre en Guaviare, donde las fuerzas armadas reportaron la muerte de 19 integrantes de un grupo insurgente. De acuerdo con la Defensoría del Pueblo, entre las víctimas se encontraban siete menores reclutados de forma forzada. El hecho provocó señalamientos y la apertura de nuevas indagaciones.

El presidente Petro añadió otros cinco casos: cuatro menores fallecidos en un bombardeo realizado el 1 de octubre en Caquetá y uno más en un operativo del jueves pasado en Arauca, zona fronteriza con Venezuela. “Todos ellos víctimas del reclutamiento forzado por parte de criminales que los han llevado a las hostilidades”, escribió el mandatario en la red X.

Además, Medicina Legal informó que el 24 de agosto murieron tres menores en otro bombardeo en Guaviare. Estos episodios ocurren en medio del prolongado conflicto armado que enfrenta Colombia desde hace seis décadas y en el que grupos ilegales continúan incorporando a menores en sus filas.

La Fiscalía General Penal Militar y Policial anunció que abrió una investigación para “verificar” si el bombardeo en Guaviare cumplió con los principios y normas que regulan el uso de la fuerza pública dentro del conflicto, según indicó en un comunicado.