El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, generó incertidumbre el miércoles 27 de noviembre de 2024 al afirmar que México había aceptado frenar de manera inmediata la llegada de migrantes a territorio estadounidense, en una declaración que no fue confirmada por el gobierno mexicano y que dejó dudas sobre los detalles de cualquier posible acuerdo.

Trump, quien asumirá la presidencia el 20 de enero de 2025, escribió en su red social, Truth Social, que México “detendrá a las personas que se dirigen a nuestra frontera sur, con efecto inmediato”, y destacó que esta medida ayudaría a “detener la invasión ilegal de Estados Unidos”. En el mismo mensaje, agradeció a la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, por su cooperación.

Poco después de las declaraciones de Trump, Sheinbaum ofreció su propia versión de la conversación, aclarando que no se había acordado ninguna medida para frenar el flujo migratorio hacia Estados Unidos.

Ante los hechos, la mandataria mexicana aseguró en redes sociales que la charla con Trump fue “excelente” y que ambos abordaron la estrategia de México frente al fenómeno migratorio, pero que en ningún momento se discutió un compromiso para bloquear el paso de migrantes.

La presidenta señaló que, por el contrario, México había logrado contener el flujo de caravanas hacia la frontera norte, explicando que dichas movilizaciones son atendidas en su territorio para evitar que lleguen a la frontera con Estados Unidos. “También hablamos de reforzar la colaboración en temas de seguridad y en la lucha contra el consumo de fentanilo”, detalló Sheinbaum.

Por otro lado, el equipo de transición de Trump no ofreció detalles adicionales sobre el supuesto acuerdo con México, lo que ha aumentado la especulación sobre la naturaleza de las conversaciones. Es importante señalar que el presidente estadounidense sigue siendo Joe Biden, quien mantendrá el control de la Casa Blanca hasta el 20 de enero, lo que limita la capacidad de Trump para negociar o implementar nuevas políticas antes de su toma de posesión.

Finalmente, la falta de claridad y los desacuerdos entre Trump y Sheinbaum sobre los términos del acuerdo sugieren que, en caso de existir algún entendimiento, podría tratarse de una estrategia de negociación por parte del presidente electo, quien en su primer mandato utilizó tácticas similares para presionar a México a tomar medidas en materia migratoria.