Ronald Koeman es uno de los principales responsables del desastre del FC Barcelona, ya que no está encontrando soluciones para hacer mejorar al equipo. Sin embargo, los futbolistas también tienen una parte importante de culpa y el desastre de Lisboa también se le tiene que atribuir a ellos. Ninguno estuvo a la altura, pero unos más que otros acabaron señalados por su desempeño y las sensaciones que dejaron. Estos son los futbolistas que quedan más ‘tocados’ tras el 3-0 del Benfica.
Ter Stegen
Aunque la calidad del alemán es indiscutible, desde hace ya un tiempo está lejos de su mejor versión. Alterna paradas increíbles con errores infantiles o acciones en las que pudo hacer más, como la de este miércoles en Portugal en el 1-0. El tiro de Darwin Núñez entró por su palo y aunque iba fuerte, claramente pudo hacer algo más para evitar el tanto. Además, casi regala un gol al propio charrúa con una salida sin sentido en la que acabó regateado y dejando la portería libre. El equipo necesita que recupere su mejor versión.
Gerard Piqué
El zaguero fue seguramente el principal señalado, ya que se fue al banquillo en el minuto 33 por Gavi. Koeman le sustituyó por miedo a que viese una segunda amarilla que el árbitro llegó a perdonarle cuando aún estaba en el campo. En la media hora que jugó estuvo lento, desubicado y sufrió bastante ante los delanteros del Benfica. Los años pesan y al ‘3’ cada vez se le notan más en partidos de este nivel.
Eric García
El de Martorell no tiene nivel para jugar en el Barça. Por lo menos a día de hoy, está lejos de lo que se le debe exigir a un central en el FC Barcelona. Quedó retratado una vez más esta temporada en el 1-0 de Darwin, dejándole demasiado espacio y siendo regateado con facilidad. Además, apenas ganó duelos individuales en todo el choque, sufrió muchísimo durante todo el duelo y acabó expulsado en los últimos minutos tras agarrar en una contra a un rival. Una noche para olvidar del ex del City.
Sergio Busquets
Aunque no fue su peor partido, el capitán volvió a dejar claro que ya no está para ser el único mediocentro del Barcelona en partidos importantes de Champions. El físico del de Badia no le da para aguantar el ritmo que imponen sus rivales y ante el Benfica volvió a sufrir en las transiciones. Necesita estar arropado para rendir y cuando no lo está queda expuesto y se acaba convirtiendo en un problema a la hora de defender su espalda.
Sergi Roberto
El de Reus volvió a estar desaparecido en ataque jugando como carrilero. No le da profundidad al equipo, no desborda absolutamente nada con balón y no aporta lo que debería aportar siendo prácticamente extremo. Koeman se empeña en contar con él para jugar en la derecha en su 3-5-2, pero el catalán tampoco dio el nivel contra los portugueses y volvió a quedar señalado.
Memphis Depay
Aunque puede ser injusto, ya que el holandés no fue ni mucho menos de los peores, sí cabe decir que ante el Benfica quedó aún más claro que no está para ser el líder ofensivo del Barcelona. Por rol y por nombre debería serlo sin Ansu Fati ni Ousmane Dembélé, pero no está dando el rendimiento que se le debería exigir. Contra los portugueses apenas amenazó la portería rival, pecó de individualista en varias jugadas y no supo elegir bien en muchas otras. Será un buen complemento, pero de momento no está funcionando como estrella.
Luuk de Jong
El ex del Sevilla no tiene nivel para jugar en el Barça y no lo va a tener nunca. En Lisboa deambuló por el campo hasta ser sustituido y no generó nada con el balón en los pies. Casi no participó en el juego ofensivo de su equipo y, además, falló las dos que tuvo. En una de las que erró, ni siquiera había portero y, aunque se la sacó un defensa, parecía que su tiro incluso podía ir fuera directamente. Su papel no debería pasar de ser una solución de emergencia para las segundas partes.
