Este 17 de marzo volvían los octavos de final de la Champions League y lo hacían con un encuentro que venía decidido desde la ida, pero en el que, aún así, la Lazio buscaría dar la sorpresa. En el Allianz Arena se enfrentarían ambos conjuntos por una plaza en los cuartos.
Los bávaros salían con un esquema 1-4-5-1 con Nübel en portería; defensa de cuatro con Pavard, Boateng, Alaba y Lucas Hernández; centro del campo con Kimmich, Goretzka, Sané, Müller y Gnabry; en punta, Lewandowski.
Por su parte, los italianon planteaban un esquema 1-3-5-2, muy ofensivo, con Reina defendiendo los palos; defensa de tres con Radu, Acerbi y Marusic; centro del campo con Escalante, Luis Alberto, Milinkovic-Savic, Lazzari y Fares; en el ataque, Correa y Muriqi.
Los primeros compases del partido fueron dominados por el Bayern, quienes fueron creando poco a poco ocasiones, pero con poca efectividad. No obstante, la Lazio buscaba su contrajuego y su oportunidad de entrar en el partido y en la eliminatoria, pero la defensa alemana no dejaba hueco.
Poco a poco se fueron igualando las fuerzas hasta que, en el minuto 33, Acerbi cometió penalti y Lewandowski lo lanzó de manera magistral para poner el 1-0 en el luminoso. Tras un cuarto de hora más de juego se llegaba al descanso con un marcador favorable a los locales y una eliminatoria prácticamente sentenciada.
La segunda parte se presentaba igual de competida que la primera, con ocasiones para ambos bandos y mucha igualdad en el juego. Desde el inicio, fue un intercambio de golpes. Muestra de ello fue el mano a mano fallado por un delantero de la Lazio en el 71’ y, pocos segundos más tarde, un contragolpe genial del Bayern acabaría en el 2-0 por medio de Choupo-Moting.
Pese al golpe en el partido y en la eliminatoria por parte de los bávaros, los visitantes seguían buscando sus oportunidades para, al menos, maquillar el resultado global. Fruto de ello, en el 82’, Parolo remataría a puerta y pondría el 2-1 en el marcador. En el minuto 84’, los italianos volverían a tener una ocasión tras un córner bien servido, pero se acabaría marchando por encima de la portería.
Tras cuatro minutos de añadido, el FC Bayern sería el encargado de pasar a cuartos de final, con un resultado global de 6-2, lo cual lo sitúa como favorito a llevarse, y revalidar, el título más grande a nivel europeo.
