El Salvador suma esfuerzos por la biodiversidad con la declaración de su área protegida número 209.

En un paso histórico hacia la conservación ambiental, el Gobierno presentó la incorporación de Maculís, Santuario de Arrecifes como la nueva área natural protegida del país. Este espacio, ubicado en Punta Amapala, Conchagua, departamento de La Unión, abarca 2,714.3 hectáreas y resguarda un ecosistema marino clave para la región.

El ministro de Medio Ambiente, Fernando López, anunció que esta designación posiciona a El Salvador como un referente en la protección de recursos naturales y biodiversidad. “Los arrecifes coralinos en esta zona son hábitats esenciales para numerosas especies marinas, muchas de ellas en peligro de extinción. Este esfuerzo consolida nuestro compromiso con el desarrollo sostenible en beneficio de todos los salvadoreños”, sostuvo.

La región, conocida por su belleza natural y riqueza biológica, incluye arrecifes de coral que desempeñan un papel vital en la sostenibilidad del ecosistema costero. La preservación de este santuario no solo busca proteger a especies marinas, sino también mitigar los efectos del cambio climático al mantener el equilibrio ecológico.

Este logro forma parte de una política integral que suma 209 áreas naturales protegidas en el territorio nacional.