Lluvias dejan decenas de muertos y obligan a evacuar a miles en el sudeste asiático
Las intensas lluvias que afectan al sudeste asiático han provocado decenas de muertos y miles de evacuados en distintos países de la región. De acuerdo con informes oficiales, Tailandia, Indonesia, Malasia, Vietnam y Filipinas registran severas inundaciones y deslizamientos de tierra en medio de una temporada de tormentas que continúa activa a finales de noviembre.
En Tailandia, las autoridades elevaron a 46 el número de fallecidos por las inundaciones que afectan al centro y sur del país, donde alrededor de 3,2 millones de personas se han visto impactadas. Un total de 20 provincias reportan anegamientos, incluidos destinos turísticos como Ayutthaya y Surat Thani.
Ante los hechos, el Departamento de Prevención y Mitigación de Desastres indicó que, aunque el nivel del agua desciende en el centro del país, la situación continúa siendo crítica en el sur, donde incluso un portaaviones de la Marina ha sido utilizado para labores de asistencia.
En Indonesia, al menos ocho personas murieron y 58 resultaron heridas en la provincia de Sumatra Septentrional debido a inundaciones y deslizamientos de tierra. La Agencia Nacional para la Gestión de Desastres informó que más de 2.850 habitantes fueron evacuados en la regencia de Tapanuli Sur, donde rescatistas utilizan botes para sacar a personas de viviendas completamente anegadas.
Por otro lado, en Malasia, la agencia meteorológica mantiene alertas ante las precipitaciones en varios estados del norte, mientras el número de evacuados supera los 10.000, de acuerdo con reportes recopilados por la agencia Bernama.
Vietnam y Filipinas también continúan bajo condiciones adversas. Según datos de plataformas de monitoreo, ambos países enfrentan lluvias asociadas a la tormenta tropical severa Verbena, que avanza desde Filipinas hacia Vietnam. Este último aún no se recupera de los recientes deslizamientos e inundaciones que han dejado cerca de 100 fallecidos en zonas del sur y del centro.
Finalmente, el panorama regional refleja una temporada de tormentas tropicales y tifones marcada por eventos recientes como Fung-wong y Kalmaegi, este último responsable de más de 260 muertes en Filipinas y Vietnam, en un contexto que expertos vinculan al calentamiento del océano.



