La UEFA ha decidido anular la suspensión de un partido que pesaba sobre el entrenador del FC Barcelona, Hansi Flick, y su segundo, Marcus Sorg, lo que les permitirá estar en el banquillo durante el debut del equipo catalán en la Liga de Campeones frente al Newcastle en Inglaterra el próximo jueves.

La sanción original había sido impuesta debido a incidentes ocurridos en el túnel de vestuarios del estadio Giuseppe Meazza, durante la semifinal de la pasada Champions entre el Barcelona y el Inter de Milán. Sin embargo, tras el recurso presentado por el club, el máximo organismo del fútbol europeo revisó la situación y decidió suavizar la sanción.

Aunque la UEFA mantuvo la multa de 20,000 euros ($23,447) para cada técnico, anuló la suspensión de un partido bajo un periodo de vigilancia de un año. El Barcelona, además, deberá hacerse cargo de los gastos derivados del procedimiento.

El club catalán defendió en su recurso que los incidentes fueron consecuencia de la tensión generada por la magnitud del encuentro, y que no había pruebas de que los entrenadores hubieran insultado a los oficiales antidopaje. Asimismo, recordó que tanto Flick como Sorg se habían disculpado públicamente y argumentó que el incidente fue de carácter privado y no tuvo repercusión pública.

La UEFA, considerando los argumentos del club y el principio de proporcionalidad, decidió suavizar la sanción y permitir que los entrenadores puedan estar presentes en el próximo encuentro del Barcelona.