La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha desplegado un equipo multidisciplinario de expertos en la República Democrática del Congo (RDC), tras la declaración oficial de un nuevo brote de ébola en la provincia de Kasai, en el centro del país.

De acuerdo con los datos actualizados, la enfermedad ha provocado hasta ahora 28 casos sospechosos y 16 muertes, entre ellas cuatro trabajadores de la salud. La tasa de letalidad estimada se sitúa en un 57 %, lo que refleja la gravedad del brote.

Patrick Otim, responsable de emergencias sanitarias de la Oficina Regional de la OMS para África, explicó en una rueda de prensa que se enviarán especialistas en epidemiología, prevención y control de infecciones, laboratorio y gestión de casos para reforzar el trabajo de las autoridades locales.

Además, la organización proveerá dos toneladas de suministros médicos, que incluyen equipos de protección personal, laboratorios móviles y materiales para los centros de tratamiento en Bulape y Mweka, las zonas más afectadas.

En las próximas 72 horas, la prioridad será garantizar la llegada de vacunas contra la cepa de Zaire, la detectada en este brote, junto con la cadena de frío, personal sanitario y recursos necesarios para su distribución.

Por su parte, el ministro congoleño de Salud Pública, Samuel Kamba, anunció que se ha activado un plan de respuesta de emergencia que incluye la búsqueda activa de casos, el monitoreo de contactos, la apertura de nuevos centros de tratamiento y campañas de sensibilización comunitaria.