El expresidente de Brasil, Jair Bolsonaro, atraviesa una nueva crisis de salud y permanece internado en la unidad de cuidados intensivos del Hospital DF Star, en Brasilia. Así lo dio a conocer su equipo médico en una nota difundida este jueves a través de su cuenta oficial en X (antes Twitter).

De acuerdo con el reporte, Bolsonaro presentó un “empeoramiento clínico” tras la cirugía intestinal a la que fue sometido a inicios de abril. El exmandatario está siendo evaluado nuevamente debido a complicaciones como presión arterial elevada y alteraciones en sus pruebas hepáticas.

Esta situación se suma a un historial médico complicado derivado del atentado con arma blanca que sufrió durante su campaña electoral en 2018. Desde entonces, Bolsonaro ha enfrentado múltiples intervenciones quirúrgicas y hospitalizaciones por secuelas intestinales. En 2022, sufrió una obstrucción intestinal y, en 2023, fue atendido en Florida por malestares abdominales.

La última recaída ocurrió tras un evento con simpatizantes en el noreste del país, pocos días después de encabezar una manifestación en São Paulo, donde reapareció públicamente tras conocerse la decisión del Tribunal Supremo de juzgarlo por su presunta implicación en un intento de revertir los resultados electorales de 2022.

A pesar de su condición, el exmandatario se pronunció el martes mediante un mensaje en redes sociales, asegurando que sigue “con fe, determinación y mucho agradecimiento a todos por sus oraciones”.

El equipo médico ha indicado que continuará bajo estricta vigilancia, recibiendo fisioterapia motora y tratamiento preventivo para evitar trombosis.

Mientras su estado de salud se mantiene delicado, Jair Bolsonaro enfrenta también una etapa judicial, con un juicio pendiente por cargos relacionados a un supuesto complot golpista.