Este martes, un barco militar italiano atracó en el puerto albanés de Shengjin, transportando a 49 migrantes que fueron interceptados en el mar Mediterráneo mientras intentaban llegar a las costas italianas. 

Los migrantes serán internados en centros de detención y expulsión construidos en Albania, en virtud del acuerdo firmado entre la primera ministra de Italia, Giorgia Meloni, y su homólogo albanés, Edi Rama, en noviembre de 2023.

Este acuerdo, permite a Italia procesar a ciertos migrantes rescatados en el mar en centros albaneses, el cual, entró en vigor en octubre de 2024. Sin embargo, la implementación de esta medida ha enfrentado desafíos legales. 

En dos ocasiones, la justicia albanesa bloqueó las transferencias, citando un fallo del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (UE), que establece que solo países completos, y no partes de ellos, pueden ser designados como seguros para el reasentamiento de migrantes.

Los centros de detención en Albania están destinados únicamente a migrantes procedentes de países considerados seguros, según una lista elaborada por el gobierno italiano. 

Inicialmente, esta lista incluía 22 naciones, pero fue reducida a 19 después de que se detectaran áreas inseguras en algunos países.

El Tribunal de Justicia de la UE ha programado una audiencia para febrero de 2025, en la que se espera una resolución que aclare el futuro del acuerdo y su aplicación.